Padre Villegas y su labor se recordaron en romería
La labor social del padre Gerardo Villegas, quien impulsó la creación de la procesión del Cristo del Consuelo en Guayaquil, fue recordada ayer por cuarto año consecutivo con una romería en el cementerio Ángel María Canals, ubicado en el Suburbio oeste de la ciudad.
Más de 60 personas acompañaron al padre Rómulo Aguilar, vicario de la Arquidiócesis de Guayaquil, en un acto litúrgico realizado alrededor de la tumba del padre Villegas.
El homenaje inició con una misa efectuada al mediodía de ayer en la Catedral de Guayaquil, a la que asistieron cientos de fieles que recordaron anécdotas del párroco que por más de cuatro décadas organizó la manifestación religiosa más grande del país, que alberga cada año a más de medio millón de feligreses.
Tanto la misa como la romería fueron organizadas por la Fundación padre Gerardo Villegas, que gestiona la iniciativa desde el primer aniversario del deceso del sacerdote, ocurrido en la ciudad de Cusco (Perú), en 2007. El religioso tenía 79 años en el momento de su muerte.
Fieles comentaron sobre la vocación del padre Villegas
Durante la romería fueron visibles las muestras de cariños de quienes conocieron de cerca al padre Villegas. Algunas personas, incluso, no ocultaron sus lágrimas cuando se acercaron a la tumba del sacerdote.
Ketty Chávez, de 40 años, ha vivido toda su vida en el sector de la Novena y Pancho Segura, a pocos metros de donde residía el padre Villegas, en la iglesia Virgen de Guadalupe (la Décima y Pancho Segura).
“Se imaginará que cada mañana tenía la oportunidad de ver al padre salir de la parroquia muy temprano para cumplir con su rutina diaria”, recordó Chávez.
Por esta razón, el “buenos días” era cotidiano entre Chávez y el padre Villegas. “Lo conocí cuando era adolescente en los talleres de formación juvenil”.
En esos espacios, recordó Chávez, escuchó los primeros consejos sobre cómo llevar la relación de pareja. Isabel León, de 60 años, también recibió los mismos consejos hace cerca de 20 años, cuando tenía aproximadamente 3 décadas residiendo en Guayaquil.
“Yo vine desde Salitre y desde el principio vi que el padre Villegas era muy especial”, dijo León. “Siempre estaba presto para ayudar a todos, no importaba de donde venía”.
Fundación continúa labor social en el Suburbio
El presidente de la Fundación padre Gerardo Villegas, Wilson Rodríguez, también reconoció la “vocación de padre” en la persona de quien da el nombre a la organización que dirige hace cerca de 4 años.
“Eran once o doce de la noche y el padre seguía trabajando”, comentó Rodríguez. “Él ayudaba inmediatamente, cuando hay otros que sugieren que regresen otro día”.
La fundación surgió como una manera de continuar “esa entrega y carisma” del padre Villegas en el Suburbio oeste de la ciudad.
Son más de 20 jóvenes que colaboran con Rodríguez en la tarea de organizar talleres de capacitación y orientación, así como labores sociales, como entrega de canastas de víveres.
“El padre Villegas hizo de cada gestión una tradición, empezando con la procesión del Cristo del Consuelo”, afirmó Rodríguez quien colaboró con el párroco desde 1978.