Publicidad

Ecuador, 26 de Septiembre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

Nuevos estudios verificarán afectación al estero Salado

Brigadistas del Ministerio de Salud visitaron, hace unas semanas, los sitios de estrangulamiento del estero Salado para tomar muestras de sangre a la población de las riberas.
Brigadistas del Ministerio de Salud visitaron, hace unas semanas, los sitios de estrangulamiento del estero Salado para tomar muestras de sangre a la población de las riberas.
31 de marzo de 2014 - 00:00

El Ministerio de Salud Pública (MSP) realizará nuevos estudios para corroborar si la contaminación por metales presentes en el estero Salado no representa algún riesgo para las familias que viven en las riberas.

La fecha para la investigación aún no ha sido definida. Los datos que se obtengan servirán para esclarecer los resultados del último muestreo realizado en los puntos de estrangulamiento del afluente,  dijo José María Palau, coordinador zonal 8 del MSP.

Hace un mes, aproximadamente, la cartera de Estado impulsó la toma de muestras de sangre a 146 personas para determinar si la alta concentración de metales pesados (mercurio, plomo, cobre y cadmio) en el estero Salado significaba una amenaza para el bienestar neurológico de la población del Suburbio Oeste.

Palau afirmó que aproximadamente el 1% dio positivo a una concentración, por encima de lo normal, de los metales que existen en el Salado. Estadísticamente, “no es significativo”.

No se descartó que las medidas adoptadas por el Estado desde hace casi 4 años (limpieza y oxigenación del estero, reforestación de riberas y reubicación de las familias) hayan incidido en el reciente resultado. “Es una hipótesis que habrá que corroborar”. Para Palau se tendría que hacer un comparativo entre los sitios de estrangulamiento, las áreas oxigenadas y el resto del estero. Por ejemplo, en zonas como el estero Puerto Lisa, donde el afluente no circula con normalidad, hay una mayor contaminación que en lugares más abiertos como el estero Mogollón.

El MSP, previo a la toma de muestras de sangre, tomó precauciones para evitar que los análisis arrojen positivos falsos. Los habitantes debieron responder un cuestionario que incluía una consulta sobre los alimentos ingeridos durante las últimas 48 horas.

Palau explicó que alimentos como el camarón tienen una concentración natural de mercurio. Además, los moradores acostumbran a pescar y consumir lo que obtienen de los ramales de estero. “Las personas que habían consumido mariscos fueron descartadas”.

Lo que se buscó determinar fue si las descargas químicas producidas por las industrias habrían tenido un efecto directo sobre las personas. Metales como el plomo ingresan a la sangre tan solo por inhalación.

Pese al resultado del último muestreo, Palau advirtió que aún no se puede concluir que no existe riesgo para la población que habita al pie del Salado.

Según datos de los dispensarios y centros de salud de la zona oeste de la ciudad, existen indicios de que los contaminantes presentes en el estuario  han  incidido, incluso, en el aprendizaje de los niños.

En las cifras proporcionadas hace dos meses por el MSP, se estimó que al menos 170.000 personas eran afectadas por este tipo de contaminación.

Bronquitis, cáncer de próstata, hipertensión, afecciones cardíacas y vasculares son las enfermedades generadas por alta concentración de cadmio, mercurio, plomo y cobre. A la lista de dolencias recurrentes en la zona se suman el autismo, la depresión y las alteraciones neurológicas.

Sin embargo, en una revisión de los datos se determinó que la afectación es menor. Las enfermedades detectadas en los dispensarios cercanos al estero son similares al resto de la ciudad.

Para el viceministro de Salud, Miguel Malo, quien estuvo presente durante el proceso del último muestreo, las hipótesis relacionadas con el sistema neurológico son las más preocupantes.

Los efectos de la contaminación en la ciudadanía por metales pesados, según el funcionario, son de largo plazo y los más vulnerables son los niños. “El deterioro de órganos y células es progresivo y los primeros síntomas son detectados después de meses o años”, advirtió el viceministro, quien alertó también del impacto negativo en el aprendizaje.

Por su parte, el Ministerio de Ambiente criticó que el Cabildo porteño no se haya encargado de la revisión periódica de los niveles de contaminación del brazo de mar, la respectiva remediación ambiental y sancionar a las empresas y personas que han causado la contaminación.

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

El Telégrafo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media