Obtener un rostro con mayor luminosidad, una piel más elástica y, en general, una mejor apariencia física es parte de los beneficios de los tratamientos rejuvenecedores que se ofrecen en varios centros estéticos y spas de Guayaquil.  

Dos de ellos -los  más importantes, dicen los especialistas- son el tratamiento con plasma sanguíneo  y el que se realiza con células madre vegetales, obtenidas de árboles  como la Secuoya.    

El médico estético, Nelson Medina, realiza el tratamiento con plasma sanguíneo desde hace  2 años, es decir, desde que la técnica se conoció en el país. Según explica nació como una opción en  áreas de la medicina ajenas al  embellecimiento.            

“Este procedimiento se utilizaba en la traumatología para curar de forma más ágil fracturas óseas y roturas fibrilares en los músculos. Su aplicación logra que el tiempo de regeneración celular y recuperación sea mucho más rápido”, afirma.

Medina indica  también que esta técnica  empezó a aplicarse en la odontología para colocar  implantes, pues estos pegaban  rápido y de mejor forma.

“El plasma contiene plaquetas, factores de crecimiento que regeneran los tejidos. Su efecto es similar a la cicatrización  de la piel cuando alguien se lastima”, explica el galeno. El procedimiento se trata de un implante del tipo “autólogo”, es decir, con material que se obtiene del mismo paciente.

Según detalla, se extraen 10 centímetros cúbicos de sangre, que pasa por un proceso de centrifugación, mediante el cual se obtiene cerca de 3 centímetros cúbicos de plasma, el cual alcanza para trabajar en la cara, cuello y manos del paciente.    

Medina indica que el material se coloca con una jeringuilla de insulina y una aguja muy delgada, sin penetrar en la piel, únicamente pinchando en los diferentes puntos que se van a tratar como el entrecejo, las zonas nasogenianas, mejillas, el contorno de los ojos, el cuello y las manos, con un centímetro de distancia entre un punto y otro.

“El resultado final se ve dos o tres semanas después, porque es el tiempo que toman las plaquetas en regenerar la piel. Es evidente el cambio en el rostro de los pacientes cuando se han sometido a este tratamiento”, afirma el médico estético. Este tratamiento se realiza en tres o cuatro sesiones y su valor es de $60 cada una, con una duración de 15 minutos y se realiza con anestesia local.

Medina indica que este tratamiento es recomendado para tratar todo tipo de arrugas en personas que tienen más de 20 años. Según dice, se trata de un procedimiento regenerativo y preventivo, que da mejores resultados si se realiza a  temprana edad.

Es recomendado  para personas que tienen daños en la piel, como cicatrices por acné, y para quienes sufren de  dermatitis seborreica.

Otro de los tratamientos que los spa presentan como uno de los más modernos  es el realizado con células madres de origen vegetal.

La cosmetóloga Yadira Reyes, de Bioformula, local ubicado en el Centro Comercial Las Vitrinas, al norte de la ciudad, sostiene que el tratamiento comienza con una limpieza facial y un peeling a base de granos de bambú, seguido de una crema hidratante y un masaje facial.

“Finalmente se coloca el suero del extracto de las células madre en el rostro, haciendo énfasis en los lugares que más se requieran, que generalmente son el contorno de los ojos para evitar las arrugas llamadas patas de gallo”, explica la especialista.

Al final -agrega- se coloca una mascarilla  a base de células madres. De acuerdo con ella, este tratamiento de 5 sesiones permite a las personas tener un rostro terso, sin líneas de expresión y totalmente humectado, pues es antiedad, reafirmante, revitalizante y nutritivo.

El valor total asciende a $350 y cada sesión dura entre 45 minutos y una hora.

En Dharma Spa, ubicado en la avenida Víctor Emilio Estrada y Las Monjas, en Urdesa, también se realiza este tratamiento con  células madre.

La cosmetóloga Carla Yong explica que a este tratamiento antienvejecimiento se agrega un procedimiento con un aparato denominado Solitón, que activa las células de colágeno y elastina de la piel, mediante la emisión de una luz especial o una luz láser.

La importancia de contar con un especialista

La médica nutrióloga y estética, Lorena Miranda, considera que el auge de estos tratamientos en los últimos años se ha dado porque la gente le da más importancia a la apariencia física, ya que es una forma de ser aceptados socialmente.

Ella señala que cada tratamiento dependerá del paciente, de su tipo de piel y de sus necesidades. Por eso recalca la importancia de que sea el médico estético el que realice una valoración facial de la calidad y tipo de arrugas que tiene. “Los médicos conocemos la anatomía de la piel y lo que cada paciente necesita”.

La especialista afirma que hay muchas técnicas que han llegado al país y que se han “desprestigiado”, como es el caso del tratamiento con la toxina botulínica (conocido comercialmente como Botox), pues es utilizado en gabinetes o peluquerías donde -según explica- no saben darle un uso correcto.

Según dice, hace falta un estricto control de las autoridades de salud en torno a este tema.

Con ese criterio  coincide el doctor Nelson Medina.  Él destaca que con la aplicación  de la técnica del plasma sanguíneo únicamente en consultorios médicos y de la mano de profesionales en estética se intenta evitar negligencias médicas.

Miranda afirma que aunque muchos de estos procedimientos no se  realizan en  quirófano, se debe tener en cuenta la asepsia, la garantía y calidad de los productos con los que se trabaja y las condiciones del paciente.  

Cuidados preventivos

Médicos y cosmetólogos concuerdan en que hay medidas que se pueden tomar desde temprana edad para evitar el envejecimiento prematuro. Según Carla Yong, antes existía la creencia de que la piel debía cuidarse a partir de los 30 años, pero ahora eso ha cambiado.

“Desde los 20 años es importante realizarse limpiezas faciales e hidrataciones”, afirma la especialista. Y recalca que es importante que las mujeres no duerman con maquillaje y que se utilice siempre una crema hidratante medicada para el cuidado de la piel, dependiendo de si esta es grasosa, seca o mixta.

La doctora Lorena Miranda pone énfasis en la alimentación como punto de partida para tener una bonita  piel. “Lo ideal es ingerir vegetales y frutas que tengan antioxidantes con vitamina E y A que son las que mantienen la piel tersa; y fibra, para eliminar las toxinas”.

Ella ratifica la importancia de ingerir al menos 8 vasos de agua al día para mantener la hidratación de la piel.

En cambio, Yadira Reyes  sostiene que es muy importante cuidarse del sol, pues este es uno de los  factores que influyen en el envejecimiento prematuro.

“Hay protectores solares de diferentes factores, sombrillas y sombreros para que la gente no se exponga directamente al sol”.