Los vecinos del Suburbio piden la reparación de calles y aceras

Emilio Villasagua, en el Suburbio Oeste de Guayaquil, observa al pie de su inmueble un montículo de pedazos de pavimento.  

Los escombros, cercados por una malla naranja, están mezclados con restos de basura que personas desconocidas dejan en el lugar.

Villasagua, quien repara llantas de carros en una vulcanizadora, se queja de los problemas que ocasiona la acumulación de desechos, que cubre un carril de la intersección de las calles 25 y la G.  

“Las personas que caminan por aquí se tropiezan y se caen con frecuencia”, indica el ciudadano.

Según un letrero, el Municipio de Guayaquil desarrolla allí la rehabilitación de las redes de agua potable del Suburbio Oeste. El contratista es Sade Cgth Ecuador.

Asimismo, el rótulo señala que el costo de los trabajos asciende a $755.734.

En el sitio se produce congestión vehicular, debido a la ocupación de la calzada.  

“Algunos negocios se perjudican. Ningún automotor puede estacionarse porque las calles están dañadas”, añade.

En dicha intersección hay otra abertura cerca de donde los autobuses toman y dejan a los pasajeros.

El morador Pedro Vaca pide a las autoridades que coloquen señalética reflectiva, pues en las noches es un riesgo conducir por el sector.  

El morador también pide al Cabildo que envíe a trabajadores para que limpien, pues el sitio se convierte en botadero improvisado.

El ciudadano Luis García, quien habita en la 14 y la G, hace observaciones a la gestión de la Alcaldía.

Él protesta porque las cuadrillas de trabajadores rompieron el suelo para instalar tuberías, sin embargo, las vías no han sido reparadas. “Ya vamos para 7 meses así”, calcula.

Por otro lado, los vehículos deben disminuir la velocidad por los baches que se formaron.

“Los escombros están cayendo en las alcantarillas y se taponan. Si empieza a llover mañana, seguramente nos vamos a inundar”, advierte García.

En la 18 y la H, los vecinos cuestionan la lentitud con la que avanza la obra. “Hay mucho polvo, la gente se está enfermando”, comenta Carlos Sánchez.

De acuerdo con el letrero, los trabajos tienen que ejecutarse en un plazo de 180 días (es decir 6 meses). La población que se beneficiaría ascendería a 5.124 habitantes. “Recursos: fondos propios”, reza en el letrero. (I)