Las restricciones a los automotores en la Av. 9 de Octubre, implementadas por la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM), no cumplieron  las expectativas de peatones y conductores que transitan por el tradicional bulevar.

La entidad, que aún no cuenta con la competencia para el control de tránsito, indicó la semana pasada que el objetivo de prohibir los giros hacia la izquierda en tres intersecciones de la vía es para dar  fluidez a los automotores y seguridad a los transeúntes.

Sin embargo, ninguna de las situaciones se remediaron en el tramo ubicado entre la av. Boyacá y Pedro Carbo. El fin de semana, los transeúntes consultados elogiaron el cambio, pero en el primer día laboral -con mayor movimiento vehicular- la opinión fue diferente.

En la calle Boyacá, donde los vehículos que vienen desde el norte tienen prohibido tomar hacia el malecón, los peatones aún tienen que esquivar los carros que llegan desde la Av. 9 de Octubre, pese a que el semáforo les otorga el paso.

Para Javier Tomalá, la modificación no es una solución y sugirió la colocación de un semáforo que regule el paso de los vehículos que giren a la derecha desde la 9 de Octubre. “De otra forma, seguirá igual que hace una semana en la acera de en frente”.

La situación se repite en otras calles con sentido norte-sur, como Escobedo y Chile.

Por su parte, la ATM justifica las acciones tomadas alegando que por los puntos intervenidos transitan aproximadamente 2.000 personas por hora y que existe el riesgo de accidentes.

En la mañana de ayer, una decena de vigilantes de la Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE) se encargó de dirigir el flujo vehicular a la altura de las calles Boyacá, Baquerizo Moreno y Pedro Carbo.

Por el momento, los uniformados tienen la disposición de evitar los giros hacia la izquierda en los puntos mencionados e informar sobre las rutas alternas, manifestó el agente William Montero.

Hasta que los superiores lo indiquen, no se multará por el incumplimiento. “Por el momento no se han registrado novedades”, indicó.

En días anteriores, la CTE informó que habrá una etapa de información sobre las recientes restricciones. Pasado ese período, los contraventores se exponen a fuertes multas.

El artículo 142 de la Ley de Tránsito estipula que quienes desobedezcan las señales serán sancionados con multas equivalentes al 30% de la remuneración básica unificada del trabajador en general ($ 106) y la reducción de 6 puntos en su licencia de conducir.

Al mediodía de ayer, los carros demoraban hasta 15 minutos en salir hacia el Malecón. Leonardo Martillo, chofer de taxi, consideró que los desvíos complicarán el paso de los automotores por las calles García Avilés, Aguirre y Pichincha “que de por sí son estrechas”.

A la altura de la calle García Avilés y Rumichaca, los carros particulares comparten carriles con las líneas de buses 155, 63, 27, 115, 131, 85, 89 y 41.

En Boyacá y Pichincha, en cambio, el espacio es más reducido por el paso de los articulados y alimentadores de la Metrovía.