Los chicos se “aguantarán las ganas” por la castidad
En el auditorio del Centro Cristiano de Guayaquil -ubicado cerca del City Mall, en el norte de la ciudad-, las camisetas negras con letras blancas y las leyendas “Aunque me digas papi rico, #yomesuboelcierre” y “El sánduche es para el recreo, #yomesuboelcierre” se hicieron notar. Y no eran pocas esas prendas, sino cientos con esta y otras frases relacionadas con la castidad... “El día en el que los jóvenes decidieron subirse el cierre” llegó el fin de semana.
De esta manera metafórica, Daniel Sante, de 30 años de edad, pastor de jóvenes del Centro Cristiano de Guayaquil, denominó al evento, que se realizó por primera vez de forma masiva: ruedas de prensa, entrevistas en medios de comunicación y mucha actividad en redes sociales fueron parte de la estrategia de difusión.
“El pasado 8 de abril incluso alcanzamos a ser Trending Topic a nivel nacional con el HT #yomesuboelcierre, un mensaje que se encuentra también en todas las camisetas que elaboramos para este evento”, explicó el motivador juvenil.
Según el emprendedor, el propósito de esta actividad es llevar el mensaje a la mayor cantidad de personas posible.
“Queremos que los jóvenes hagan conciencia sobre la toma de decisiones en su vida sexual, y las consecuencias que estas traen en el futuro. No se trata de una imposición, sino de asumir un desafío que trae sus ventajas”, indicó.
Agregó que conoce de esas ventajas bastante bien: “Yo también esperé y me mantuve en castidad hasta mi matrimonio con Marisol, mi esposa desde hace varios años”.
“No hay nada mejor que tener la tranquilidad de la abstinencia y no vivir con preocupaciones de ese tipo”, afirmó Paulo Ávila, de 20 años, quien también es integrante del grupo juvenil de la iglesia y habla desde su propia experiencia... No es virgen, pero se está dando una nueva oportunidad. Algo así como vivir una segunda castidad.
“Yo tuve mi primera relación sexual a los 11 años de edad y tuve varias chicas, además vi pornografía, pero todo eso cambió cuando conocí a Dios y vine a la iglesia. Para Él sí existen las segundas oportunidades”, expresó con una sonrisa.
-No hay peor frase que: “no me bajó” (en referencia a la menstruación), dice, recordando algunos malos ratos...
-Pero ahora hay varios métodos anticonceptivos...
-Sí, pero no existe un condón para cuidar el corazón.
Paulo afirmó que la castidad, más allá de un sentimiento, es una decisión y que no representa ningún obstáculo al momento de tener una pareja.
“Actualmente tengo novia. Ya tenemos un año y medio y ambos pertenecemos al grupo de teatro de la iglesia y mantenemos nuestra promesa de abstenernos de sexo hasta el matrimonio. Por lo mismo procuramos no estar solos, salir siempre con amigos o estar en compañía de nuestra familia. Por eso decimos súbete el cierre, cuida tu alma y evítate heridas”, expresó de forma categórica.
Sin embargo, aseguró que mantener este estilo de vida en el contexto actual es una tarea complicada. “No vamos a decir que no nos dan ganas. ¡Claro que nos dan ganas, somos humanos!”.
“La moda, la música, las facilidades del Internet, todo eso son influencias que complican mantener nuestra promesa de pureza ante Dios”, dijo José Pazmiño, un estudiante de Jurisprudencia de 21 años y también asistente al evento.
Él mantiene su castidad porque espera encontrar a la persona perfecta para compartir eso que califica como “único”.
“Nosotros tratamos de llevar este mensaje a nuestros amigos, por eso hemos invitado a varias personas acá esta mañana, para que lo escuchen y se den cuenta de la importancia de la castidad”, señaló.
Cerca de la hora de comienzo del evento, todos se confundían en un incesante corre-corre. Miguel Ángel Ulloa, conocido por sus amigos como “El Oso”, se comunicaba con otros organizadores por medio de una radio, mientras entraba y salía del auditorio. Algunos chicos se apresuraban buscando buenos puestos y se sentaban en grupos, otros pasaban al escenario para ayudar en los últimos aspectos de la organización. Mientras tanto, un grupo de chicas se maquillaba.
Este evento contó con un despliegue técnico de luces robóticas, máquinas de humo, sistema de audio y circuito de televisión, así como pirotécnica fría, que formó parte de un show en el que se presentaron obras de teatro, números de danza y bandas de rock cristiano.
“Se trata de un espectáculo multimedia, en el que, además de música y entretenimiento, habrá videos realizados por nosotros”, manifestó Daniel.
Las luces fosforescentes, en colores turquesa, fucsia y amarillo, invadieron el auditorio, mientras en el escenario se proyectaron videos musicales de varios géneros, como pop en inglés y en español, algunos incluso “del mundo”, un término que usan quienes profesan la religión evangélica para referirse a diferentes aspectos de la cultura que no están enmarcados en la práctica estrictamente cristiana.
La música era interrumpida por la imagen de Daniel, quien se hallaba en los exteriores del auditorio y que en una especie de “alfombra roja” improvisada dio la bienvenida a los cerca de 2.000 personas que asistieron al evento, que arrancó con un grito eufórico de los presentes y una coreografía con canciones del merenguero Juan Luis Guerra.
Cuando los asistentes ingresaban se les entregaba una hoja que contenía citas bíblicas y consejos, además de una especie de fórmula: “El baño secreto del calenturiento”. Esta receta requiere un galón de agua hervida, una funda de hielo en cubitos, un balde y una cuchara... Receta que tal vez, desde ese día, tendrán que poner en práctica muchos de los asistentes.