Publicidad

Ecuador, 23 de Septiembre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

Las calles se convierten en cancha y los vecinos en rivales

En sectores, como el Suburbio Oeste, la práctica de indorfútbol en las calles es muy habitual, especialmente los fines de semana y feriados.
En sectores, como el Suburbio Oeste, la práctica de indorfútbol en las calles es muy habitual, especialmente los fines de semana y feriados.
Foto: Miguel Castro / El Telégrafo
08 de diciembre de 2016 - 00:00 - Eduardo Aparicio, estudiante de la ULVR

En la mayoría de los barrios, en especial en los del sur de la ciudad,  es común ver cómo muchos jóvenes se reúnen el fin de semana o en las vacaciones para disfrutar de partidos de fútbol entre amigos. Esto se ha convertido en una tradición que no se ha olvidado con el paso de los años.

En diferentes partes de la ciudad se observan personas que  desde las 14:00 salen a jugar indorfútbol en la calle. Esto trae varios tipos de críticas, ya sea por lo que implica obstaculizar las vías o por no hacerlo en lugares en donde las condiciones sean las adecuadas para la seguridad de los jugadores.

María Antonieta Molineros es una de las personas que está en contra de que se realice esta práctica. Ella es moradora del sector de Sauces 9 y muchas veces la bulla la estresa.  “Nos hemos quejado, pero es en vano. Nadie del sector se opone a que hagan deporte, pero deben tener en cuenta que están atentando contra la tranquilidad de los vecinos”.  

Julieta Merchán cree que es bueno que los jóvenes jueguen y se diviertan. “Es una actividad sana, ya que es preferible que se recreen a que pasen metidos en sus casas con aparatos tecnológicos o en pandillas y drogas”.

Bryan Cascante, de 18 años, vive en la ciudadela Guayacanes. Él es uno de los ‘peloteros’ del barrio.

Cuenta que desde hace 6 años se reúne a jugar indorfútbol junto a sus amigos, un grupo de 9 a 10 jóvenes de entre 12 y 17 años que ponen piedras en la calle para formar sus arcos. Para él se trata de una sana actividad, ya que se divierten y hacen ejercicio, pero es mal vista por algunos vecinos.

“Creo que en la vida debemos aprender a ser tolerantes. Es verdad que algunas veces por un juego brusco alguien puede salir lastimado o se rompe un foco o una ventana. Cuando ocurre algo así nosotros reponemos el daño”.  

Para Solange Sarmiento, habitante de las calles García Moreno y El Oro, el malestar no solo es para los vecinos, sino también para los conductores. En muchas ocasiones los deportistas cierran las calles y en otras se arriesgan a jugar, aun con automotores en circulación.

“Ya han ocurrido accidentes. Algunas veces los conductores respetan a los jugadores, otras no. Son calles de circulación rápida, pero los peloteros se apoderan de ellas”.
Vicente Palma, de 67 años, considera que en su sector, Chambers y Leonidas Plaza, jugar es una tradición en donde se comparten momentos agradables entre vecinos. (I)

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

El Telégrafo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media