La tarjeta de la Metrovía no da monedas ni el saldo

Los usuarios de la tarjeta que sirve para ingresar a las estaciones del transporte Metrovía de Guayaquil    -que se obtienen en dispensadores automáticos- denuncian que el sistema sigue sin funcionar bien.   
Los ciudadanos denuncian que los lectores electromagnéticos, pese a ser adquiridos recientemente, caducan a los pocos días y los saldos acumulados desaparecen.       

El miércoles pasado Tania Cárdenas ingresó su tarjeta en el dispensador de la parada Universidad de Guayaquil para realizar una recarga. Ingresó el documento, presionó el botón de recarga y metió una moneda de $1 en la ranura. Sin embargo, el valor no fue registrado por la máquina. “No me devolvió el dinero”, dijo molesta.

El personal de la estación le informó a la perjudicada que podía esperar 20 minutos para resolver el inconveniente, pero no hubo solución. 

El hecho anterior no es el único.  Isidro Gonzabay, de 84 años, tuvo problemas para usar la tarjeta el martes pasado después de un día de comprarla en la parada Gallegos Lara. El ciudadano, oriundo de Salitre y que solo estaba de visita por la ciudad, adquirió en la terminal  un  pase en el dispensador a $0,50 (no incluye pasaje).

Pero al día siguiente el tíquet no fue reconocido por los dispositivos de recarga y no pudo depositar los $0,25 para poder ingresar a la parada de Plaza Victoria.

Para movilizarse debió esperar a otro usuario para que le prestara la tarjeta. “Si tienen caducidad, debería informarlo”, reclamó.

En otras ocasiones, son los lectores electromagnéticos los que fallan en las estaciones y no permiten la entrada de personas.

Ramiro Chávez, estudiante universitario y con una tarjeta recién adquirida, contó que el sistema falló en la parada de la calle Esmeraldas. Al llegar al sitio, intentó usar el documento, no obstante, el lector parpadeó en rojo (señal de que el pase no tiene saldo o está caducado).   “Los guardias me dijeron que aguardara para que volviera el sistema”.

Así pasaron 40 minutos. Una larga columna  de aproximadamente 30 personas se formó. Por esa razón, algunos de los usuarios prefirieron caminar hasta la parada colegio Vicente Rocafuerte, a tres cuadras.

Pese a todas estas dificultades, la Fundación Metrovía respondió que las tarjetas no tienen fecha de caducidad.

Leopoldo Falquez, gerente de Fundación Metrovía, respondió que si uno de estos objetos falla, se debe acudir a las terminales (Guasmo, 25 de Julio, Bastión Popular y Río Daule).

De la misma manera, recomendó hacer llegar las observaciones a través de los canales disponibles de la entidad: página web www.metrovia-gye.com.ec, Facebook (Metroviagye), Twitter (@Metroviagye) y el call center call center (2130402 - 2130403 ext. 111).

Hasta 2014 se estimó que al menos el 40% de los pasajeros que se trasladan en Metrovía utiliza la tarjeta electromagnética.

Falquez también informó que existen paradas donde el 95% usa el documento.
Las tres troncales del sistema (Metroquil, Metroexpress y Metrobastión) suman 89 estaciones de las cuales 42 solo permiten el ingreso con tarjeta.

Hasta el último trimestre del año pasado, existía una disponibilidad de 700.000 tarjetas para ser distribuidas en los 210 dispensadores.

De acuerdo con la Fundación, las taquillas serán eliminadas gradualmente en los sitios donde exista mayor uso del documento.

Hasta 2013 hubo un incremento de entre el 2,5% y 21,4% de pasajeros con relación a la estimación inicial: 30 mil usuarios más en Metroquil, 5 mil en Metrobastión y 20 mil en Metroexpress.