La sazón casera es el aval de la Menestra de Pocha
Las chimeneas del restaurante la Menestra de Pocha estaban a todo vapor, a las 19:00 del miércoles. A esa hora en el local había 10 mesas ocupadas. Todos atraídos por el arroz con menestra, que desde 1998 es la especialidad de la casa.
María Enriqueta Cevallos de Castro recuerda que comenzó hace 13 años con su negocio, que lo acondicionó en la sala de su casa. El local abrió un lunes y ese día vendió cinco platos de arroz con menestra y carne. Pero al siguiente día, la venta fue de 180.000 sucres, que era una cifra considerable en esa época.
Durante los tres primeros años, Cevallos alternó su trabajo en la Caja del IESS con su negocio familiar. “Yo salía del trabajo a las 16:00 y a las 17:00 ya estaba aquí para comenzar una nueva jornada de trabajo, porque todo lo que vendemos siempre fue preparado el mismo día”.
El negocio aumentó y al cabo de varios meses, la noche cerraba con 30 platos vendidos. “Yo no sabía casi nada de cocina, porque siempre tuve alguien que me ayudara con las cosas de la casa. Cuando mi esposo probó la primera menestra que hice no lo podía creer, porque estaba riquísimo y pensó que no la había hecho yo”.
María Enriqueta Cevallos cuenta que su negocio comenzó en la época en la que el país pasaba por una crisis económica, pero, relata, no se vio mayormente afectada por la situación económica.
“Yo comencé con un préstamo al Banco del Progreso, que al final se lo pague a la Agencia de Garantía de Depósitos. Gracias a Dios siempre nos fue bien”, señala. En el 2002, los Castro demolieron la casa que estaba junto al restaurante y ampliaron su negocio.
Cevallos fue pionera en vender arroz con menestra en la avenida Plaza Dañín, lo que sumado a su sazón fue determinante para que a su negocio llegaran cientos de clientes. Trece años después, el restaurante recibe hasta 400 comensales en los días más concurridos, que son los viernes, sábado y domingo.
El local atiende al público de martes a domingo, de 19:00 a 23:00.
Este miércoles el negocio estaba repleto. Javier Menéndez era uno de los clientes que llegaron esa noche hasta la Menestra de Pocha. “Me gustó mucho. La sazón es súper buena. Yo pedí arroz con menestra y chuleta. Estaba buenísima”, comenta el comensal.
“El lugar es acogedor, me sirven bien despachado y todo es muy rico. Yo vengo con mis amigos. Lo que más me gusta es la salsa de albahaca”, comenta Javier Patiño, otro de los clientes que estaba la noche del miércoles en el negocio.
Pocha ha centrado el eje de su carta en la especialidad de la casa. Arroz con menestra y patacones que se sirve acompañado de chuletas, carne o pollo asado. Cevallos cuenta que en una época se servía arroz con camarones y los tradicionales secos, pero decidieron cambiar por la preferencia del público.
Cevallos comenta que ha dado valores agregados a sus platos. Uno de estos es la salsa de albahaca, que es elaborada a base de apio, albahaca, perejil y aceite. Otra de sus creaciones es una vinagreta picante, que se prepara con ajo y cebolla blanca.
Los planes de Cevallos es cambiar su ubicación, porque admite que parquear en la avenida Plaza Dañín es complicado por las ordenanzas. Pero aún no han decidido el lugar donde instalarán su nuevo y único local.