Entrevista / Jimmy Jairala / Prefecto de la Provincia del Guayas
"La peor derrota de una persona es cuando pierde su entusiasmo"
El amor que tiene por los caballos se refleja en su despacho. Su escritorio es amplio; demuestra mucho orden y destaca una colección de bultos de caballos y todo tipo de piezas referentes a estos animales.
Jimmy Jairala Vallazza llegó a la Prefectura del Guayas en el 2009 con un millón de votos y el firme compromiso de ¡sacársele el sombrero a la provincia!, frase que se ha convertido en el eslogan publicitario de su gestión. Detrás de su escritorio, un portasombrero muestra 4 de estos accesorios artesanales y tradicionales del montubio ecuatoriano, esos que utiliza en sus múltiples recorridos de obras.
Las actividades de la Prefectura se manejan en 4 ejes: el primero destaca el ambiente, con la participación en proyectos en foros internacionales; el segundo aborda la infraestructura, fortaleciendo la red vial principal; el tercero es el fomento productivo, que maneja la viceprefectura y se encarga del manejo eficiente de los recursos agrícolas, y el último contempla las acciones sociales a través de dos programas: la Unidad de Rescate Animal y el Centro Integral de Equinoterapia, que se han convertido en sitios pioneros en América Latina.
Independientemente de su afición, cuando inició su gestión se realizó una encuesta sobre los elementos que identificaban al verdadero guayasense y entre las opciones destacaron el machete, el sombrero y las motos, pero ganó el caballo, que representa al montubio de la provincia.
Jairala tiene afición por la hípica desde los 7 años y esta actividad lo llevó al mundo periodístico. Su primer trabajo fue en 1973, cuando cursaba el quinto curso del Colegio Cristóbal Colón. Estudiaba en las mañanas y, luego, cumplía su función de corrector de pruebas en diario El Universo; poco a poco hizo entrevistas a diferentes artistas famosos de la época: Jesús Vásquez, Daniel Santos y la reconocida ‘Bomba de Puerto Rico’, Iris Chacón. Esto lo convirtió en el ídolo del colegio.
En 1975 aprendió a relatar carreras, experiencia que le sirvió para perderle el miedo al micrófono. Asistió a un casting en Canal 10 (hoy Tc Televisión) para debutar como locutor del noticiero. Ahí fue reportero, productor, presentador y entrevistador. Se ausentó por un año para desempeñarse como Subsecretario de Comunicación Social en el Gobierno de Sixto Duran Ballén , regresó como director de noticias, “cargo que gané con mucho esfuerzo y dedicación”. Ahí forjó una carrera de 23 años.
Su paso por la televisión le sirvió como catapulta política. Se dio a conocer y como periodista experimentó diversas vivencias en política. Su ideología no es de izquierda ni de derecha, pero es objetivo para cuestionar a cualquiera de los dos bandos y apoyar las buenas acciones de cada uno.
El atuendo casual de Jairala contrasta con la formalidad de los otros políticos. Es un hombre metódico y exigente consigo mismo y, por eso, tiene varios ideales que lo impulsan a trabajar por la provincia. Este año las obras viales son prioridad, en especial las vías: Magro Maquerón, Las Mercedes, Limoncito, Cerita y el acceso a Santa Rosa de Flandes. “Este año serán vías nuevas y asfaltadas”, asegura.
Recuerda cómo era la provincia antes de su administración.“Lo único rescatable fue la concesión de las vías para garantizar el servicio”.
Rescata que, ahora, la labor social en todo ámbito está cubierta en cada uno de los rincones de la provincia. “La Prefectura anterior tenía cara de asfalto, hoy tiene un rostro humano; eso es lo que estamos logrando con las acciones sociales de este periodo”.
En lo económico, la Prefectura ha trabajado con limitados recursos, pero con un aliado de gran importancia, el Banco del Estado, entidad que se ha convertido en un elemento estratégico para alcanzar el desarrollo de la provincia. Esta es una de las gestiones positivas que ha implementado el gobierno.
Además de los caballos, Jimmy Jairala disfruta de todas sus mascotas y de su numerosa familia. Tiene 6 hijos que adora y con quienes comparte su tiempo libre y, a pesar de que es divorciado, la relación con la madre de sus hijos es muy buena; todo para el bienestar de los jóvenes. No se arrepiente de haberse divorciado, pero sí le gustaría mantener un hogar.
A sus 58 años de edad afirma que existe algo que le gustaría realizar para cumplir su realización completa: escribir su autobiografía cuando ya nadie se acuerde de él. Su frustración más grande es no haber tenido una niña ya que “mis seis hijos son el resultado del afán por tener una nena”.
En política prefiere subir por las escaleras y no por el ascensor; llegar adquiriendo experiencias; “en este mundo siempre es mejor medir los riesgos y no asumirlos innecesariamente. Si voy a hacer algo debo estar seguro de que lo que voy a hacer va a generar algún cambio o dejar huella”. El don del servicio es algo evidente; en 2007 comenzó a dirigir Centro Democrático (movimiento humanista que prioriza el servicio social). “Pone al ser humano por encima de todo”, manifiesta. (O)