La deuda del alcalde Jaime Nebot con Guayaquil gira en torno a 6 temas

La cobertura total de agua potable, el alcantarillado y la pavimentación son algunas de las obras pendientes que el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, no ha podido cumplir en este primer año -de los 15 que lleva al frente del Cabildo- de su último periodo de gestión.  

A ello se agrega otras ofertas no concretadas como el transformar al puerto principal en una ciudad digital hasta 2019. De los 6 mil puntos de internet, que dijo se instalarían en la urbe, apenas se concretaron el 2,5%. Del mismo modo, persisten los problemas en el servicio que presta la Metrovía, tales como inseguridad y desorden, tanto en las paradas como en las unidades.

Ello se complementa con la falta de mantenimiento en zonas regeneradas y los daños que aún no se reparan en importantes vías, pasos a desnivel y otros.

Durante su discurso de campaña previo a las elecciones de febrero de 2014, el burgomaestre ofreció dar solución a la cobertura de servicios básicos en sectores populares y en aquellos que no se encontraban dentro de los límites reconocidos por la Municipalidad.

En la última rendición de cuentas de la Empresa Cantonal de Agua Potable y Alcantarillado (Emapag) se estableció que la ciudad cuenta con el 100% de agua potable y aproximadamente el 90% de alcantarillado. En este cálculo no se incluyó a Monte Sinaí, zona en donde viven los más pobres de la ciudad.

Nebot ha explicado en reiteradas ocasiones que no se podía intervenir la zona porque no estaba legalizada y tampoco proceder hasta octubre de 2013 cuando la Asamblea Nacional aprobó una reforma a la ley 88.

En el estatuto se estableció la regularización de propiedades que hayan sido construidas hasta antes de diciembre 2010.

“Aprobada la ley, el sector quedará cubierto en 2014”, ofreció Nebot en enero del año pasado.

La Emapag y el Banco del Estado (BEDE) recién firmaron un convenio crediticio en marzo de 2015, para la construcción de los tramos 3 y 4 del quinto acueducto, por un monto de $17,6 millones, en la zona noroeste.  

La obra, puesta a licitación este mes en el portal de Compras Públicas, permitirá el acceso al agua en sectores como Sergio Toral I y II, Hogar de Cristo, Francisco Urrutia, Socio Vivienda 2, Voluntad de Dios, Trinidad de Dios, Monte Sinaí, entre otros.

Además, se beneficiará a los proyectos urbanísticos María 1 y María 2, diseñados por el Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda (Miduvi).

La pavimentación popular también es una promesa no cumplida en sectores de la zona noroeste como Flor de Bastión, Paraíso de la Flor, Juan Montalvo y Balerio Estacio.

Los programas de pavimentación y repavimentación municipal apenas cubren 2.500 cuadras anualmente, según cifras de la Alcaldía. Es decir que solo el 10%, aproximadamente, de las 24.000 cuadras que existen en la ciudad recibe atención cada año.

A finales de 2014 Nebot ofreció llevar la obra a cooperativas de los Guasmos, Trinitaria Norte, Trinitaria Sur, Pascuales, El Fortín, Perimetral -hacia el oeste-, Vergeles, Bastión Popular y las cooperativas del kilómetro 8 ½ vía a Daule.

De los sectores mencionados, solo los Guasmos, Trinitaria, Pascuales y El Fortín han alcanzado una cobertura de entre el 90% y 100% de arreglo de las calles. En el resto de zonas aún se observan tierra, baches y desniveles en las vías.

Solo promesas

En cuanto a infraestructura para transporte terrestre y aéreo, la ampliación del aeropuerto José Joaquín de Olmedo es, a la fecha, la única oferta concluida al 100% durante el transcurso de 2014.  

Mientras que el sistema de bus aerosuspendido que, tentativamente, cubrirá la ruta Durán-Samborondón-Guayaquil, aún no pasa de la oficialización de los estudios de factibilidad.   

A inicios de este mes, el Municipio recibió los resultados de la investigación realizada por la empresa Arias & Villagómez Consultores Cía. Ltda.

Aunque hasta abril pasado se ofreció que el 5 de mayo se conocería la ruta definitiva del proyecto y la correspondiente licitación, recién se hará público el estudio en dos semanas. En el portal de Compras Públicas tampoco hay información reciente sobre el tema.

La oferta de convertir al puerto principal en una ciudad digital en 2019 apenas ha alcanzado el 2,5% de los 6.000 puntos de internet gratuitos. Hasta diciembre de este año, deberán estar instalados 1.200.

Según la Dirección de Informática del Cabildo, el proyecto consiste en que la ciudad tenga 55 puntos de internet gratis en colegios emblemáticos, malecones (solo funciona en el Simón Bolívar, aún no en el del Salado) y parques.

También está la restricción de cada usuario del sistema, que tendrá un máximo de 30 minutos para usar el servicio. El servicio ya se encuentra disponible en los paraderos de la Metrovía.

Otro problema detectado es la falta de mantenimientos de parques luego de la temporada invernal, lo que provoca la aparición de maleza.   

Al respecto, el Cabildo está realizando la licitación para el desbroce manual, rastrillada y limpieza de espacios recreativos en el norte para lo cual se tiene presupuestado $73.490. (I)       

Nuevos convenios para ampliar los servicios básicos 

La Empresa Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Guayaquil (Emapag) suscribió ayer contratos de créditos con el Banco Mundial y el Banco Europeo de Inversiones, para la universalización del alcantarillado sanitario y el tratamiento de las aguas residuales del sur de la ciudad, Las Esclusas.

El objetivo de la obra es alcanzar el 100% de la cobertura en el sector sur, informó el Cabildo. El proyecto consta de tres componentes y uno de ellos es la instalación de conexiones domiciliarias, que beneficiarán a 30 mil familias que viven en las riberas del estero Salado.

El Ministerio de Finanzas aprobó la garantía soberana en favor del Municipio para que el gobierno seccional pudiera acceder a los recursos.

El Banco Mundial aportará con $ 102,5 millones, el Banco Europeo, $ 102,5 millones, y el Cabildo, a través de Emapag, $ 42,80 millones.

El proyecto, en el que se invertirá un total de $247 millones tendrá un periodo de implementación de cinco años.

El financiamiento del Banco Mundial tiene un plazo de 35 años con un periodo de gracia de 15 años. (I)