Lo primero que destaca en la peluquería Mi Alborada es la amabilidad con la que se trata a los clientes. Una cordialidad que ha hecho de este sitio un lugar que siempre permanece lleno de usuarios.

La historia de este negocio se remonta a diciembre de 1992, cuando los amigos, y ahora socios, Aurelio Bohórquez y Victoria Anchundia decidieron montar su propia peluquería.

Bohórquez ha trabajado en este oficio desde los 15 años. Se tituló en el gremio de artesanos en 1989, hoy en día lleva 37 años ejerciendo de barbero. Cuenta que el maestro Gustavo Pazmiño le enseñó este oficio.

Bohórquez es oriundo del recinto Los Pocitos de Puerto Morro, lugar al que acude una vez a la semana junto con su familia.

Su socia Victoria Anchundia, quien también es estilista titulada, dice que el día de la inauguración realizaron los cortes de cabello  gratis.

“Quienes deseaban dejar una colaboración la depositaban en un recipiente de plástico. Lo que se recaudó fue mitad para Aurelio y mitad para mí, desde ahí somos socios en este local que es unisex. Nosotros  fuimos los primeros en realizar cortes con diseños y estilos”.

Anchundia reconoce que Aurelio es como un hermano y que todos quienes integran la peluquería son una familia. En el lugar también trabajan Christian Santana, Cindy Rodríguez, Winston Avilés y Magdalena Espinoza.

“Cualquier día de la semana el lugar permanece lleno de visitantes”, dice Aurelio, mientras le regala un chupete a un niño de cinco años que acudió a cortarse el cabello con su madre.

Además reconoce que el éxito de esta peluquería radica en que siempre están actualizados. Todos quienes integran este local acuden con frecuencia a charlas de expositores internacionales o cuando se dictan seminarios y conferencias.

Aunque no es su fuerte, Bohórquez ha sido maestro de varios jóvenes que rescató de la calle y ahora se emplean en el oficio.

 Victoria asegura que nació con el don para cortar el cabello. “Desde pequeña soñaba con realizar esa actividad”.

Ya que de lunes a domingo la peluquería siempre está llena,  Aurelio y  Vicky pensaron instalar una sucursal, pero decidieron quedarse en la Alborada.

“Nos dimos cuenta de que nuestros clientes vienen desde diferentes lugares de la ciudad y que la atención que le damos los hace volver. Muchas veces se ausentan unos meses pero luego regresan”.

Por este local, ubicado en la Alborada VII etapa MZ 735 Villa 4, han pasado personajes como el “Bolillo” Gómez, Francisco Maturana y otros.