Escaso mantenimiento en las escuelas intervenidas
Durante los últimos cuatro años, del total de planteles fiscales de Guayaquil intervenidos en su infraestructura, menos del 37% han recibido mantenimiento siquiera una vez para prolongar la vida útil de los espacios arreglados.
Los convenios suscritos entre la Unidad de Proyectos de Vinculación con la Sociedad (UPVC) de la Universidad de Guayaquil y el Ministerio de Educación (hasta 2009) y el Municipio de Guayaquil han beneficiado a aproximadamente 300 unidades educativas.
Sin embargo, de ese total, apenas 113 planteles han recibido obras de mantenimiento, de los cuales 13 corresponden al convenio entre el Cabildo y la UPVC.
Carlos Hernández, titular de la UPVC, explicó que hasta 2009 se pudo contar con la colaboración del Ministerio de Educación para este tipo de trabajo. En ese año, $ 300.000 fueron asignados por la Dirección Nacional de Servicios Educativos (Dinse) para este tipo de trabajo en las primeras 100 escuelas intervenidas en 2007.
Actualmente, por disposición de la Dinse, existe un presupuesto disponible de $ 47.000 para arreglos menores de las unidades que lo requieran.
Críticas en obras educativas
La escuela fiscal 24 de Mayo hace pocas semanas recibió obras urgentes por parte de la Dinse, debido a que sus baterías sanitarias habían colapsado.
Fanny Freire, titular regional de la Dinse, cuestionó que estos dispositivos no hayan recibido el debido mantenimiento.
El director del plantel, Ernesto Castillo, comentó que el presupuesto que se asigna anualmente no alcanza para varias labores de mantenimiento.
“A eso debemos sumar que las obras realizadas por la Universidad de Guayaquil no fueron de la mejor calidad”, dijo Castillo, mientras señalaba fisuras en los marcos de puertas.
Sandra Páez, directora de la escuela Andrés Pote, en el sur de la ciudad, también cuestionó la mano de obra empleada en la refacción de varias puertas del plantel.
“Es la única falla que se percibe, pero en realidad es molesto porque parece que se fuera a caer de un momento a otro”, aseguró Páez.
Al respecto, el director de la UPVC afirmó desconocer casos similares. “Y si los hubo en algún momento, se solucionó de forma inmediata”, dijo.
Hernández indicó que el mal trabajo puede disminuir el tiempo de vida útil de las obras. “Lo ideal sería que recibieran mantenimiento cada año”, señaló.
La UPVC informó que, en caso de cualquier inconveniente con las obras de intervención en los planteles, los docentes deben notificar a esta unidad.