Publicidad

Ecuador, 24 de Septiembre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

En la Santay viven 130 especies de aves

Dos obreros de Bueno & Castro durante sus labores en las camineras. Los trabajos no impiden el ingreso de las personas a la isla.
Dos obreros de Bueno & Castro durante sus labores en las camineras. Los trabajos no impiden el ingreso de las personas a la isla.
Foto: Karly Torres / El Telégrafo
01 de agosto de 2016 - 00:00 - Redacción Guayaquil

Doris Herrera, de 51 años, se siente agotada tras recorrer los primeros 3 km de la caminera que conecta la isla Santay con Guayaquil y Durán. “¿Qué tanto falta para Durán?”, pregunta a otro caminante que iba en sentido contrario a ella. “Diez o quince minutos”, le contestan y la respuesta la satisface.

Es la primera vez que Herrera se aventura a transitar por el lugar, que es intervenido por obreros de la firma Bueno & Castro. Ellos arreglan los tablones desde mayo pasado. Los trabajos no incomodan a las personas que transitan a través de un tramo aproximado de 4 kilómetros dentro de la isla. “Hay días en los que el clima favorece para una caminata tranquila”, comenta Olivia Tirado, oriunda del cantón Durán.

En estos días, en el puerto principal, se aprecia un cielo entre nublado y parcialmente cubierto. Por eso la joven Tirado siente menos fatiga al final de la caminata.

No obstante, al llegar hasta el sitio donde se ve el puente que llega hasta Guayaquil, hace una parada para refrescarse en una pequeña fuente de soda. “Sí me gustaría que existan puntos de hidratación en el trayecto desde Durán, sería algo que nos beneficiaría mucho”. En los 4 kilómetros de camineras, apenas se ve un puesto, el que Tirado, afirma, siempre está cerrado.

Durante el recorrido, uno de los sitios preferidos por los turistas y deportistas es justo a la mitad del camino, donde existe un pequeño caudal del río Guayas, que ingresa hacia la isla. Desde este punto, se puede ver parte del malecón Simón Bolívar, al otro lado del afluente.

Enrique Vera, morador del Barrio Cuba, disfruta mucho esta parte de las camineras. Él es un pescador artesanal retirado por lo que disfruta los paisajes fluviales. “Me pongo nostálgico, porque en esta ensenadita me place pescar un rato y ya estoy fuera de la actividad”.

El camino tiene colores plateado y marrón. Los tablones, fabricados de una mezcla de madera y plástico, ponen un toque rústico al ecosistema del humedal.

Cuando hay poca gente, se puede apreciar mejor la fauna del lugar, asegura Andrés González, residente del Barrio Centenario. Él procura caminar por la zona por lo menos una vez a la semana.

En ratos, hay aves color azul, que pasan transversalmente por la caminera. Para González, eso es común “cuando ven poca gente, porque los fines de semana, cuando hay más concurrencia, es como que se inhiben un poco y no se las ve”.

Según el Ministerio del Ambiente (MAE), en la isla Santay existen 130 especies de aves distribuidas en 40 familias. Los ibis blancos, garzas y jilgueros son los más comunes.

Además, existen 13 especies de mamíferos, 12 de reptiles y 2 de anfibios. En la parte lodosa, son visibles los cangrejos violinistas.  
En cuanto a la flora, hay alrededor de 60 especies de plantas, distribuidas en 43 familias, de las cuales los ejemplares que más se notan son los manglares.

En el año 2000, la isla Santay fue declarada humedal Ramsar (de importancia ecológica internacional). El tramo Durán-Guayaquil (puente y caminera) representó para el Gobierno Nacional una inversión de $ 19 millones. (I)

En Azuay y Guayas se socializa plan de remediación de pasivos ambientales

El Ministerio del Ambiente de Ecuador (MAE), liderado por Walter García, socializó el “Plan de Reparación Integral de Tenguel – Camilo Ponce Enríquez”. En el encuentro se informaron a las autoridades locales y a la sociedad civil los proyectos que el Programa de Reparación Ambiental y Social (PRAS) de la cartera de Estado ha desarrollado.

Las iniciativas, a mediano y largo plazo, permitirán la recuperación de los ecosistemas y la restitución de los derechos de las comunidades que han sufrido afectaciones por los pasivos ambientales.

La primera socialización se efectuó en el cantón Camilo Ponce Enríquez (Azuay), en las instalaciones de la Asociación Minera Bella Rica. El segundo encuentro se desarrolló en la parroquia Tenguel (Guayaquil), en el Centro de Atención Municipal: Las jornadas de trabajo contaron con la participación de más de 80 personas, entre autoridades locales, representantes de empresas privadas de la zona, profesores, estudiantes y sociedad civil en general.

Javier Armijos, jefe de la Unidad Ambiental del Municipio de Ponce Enríquez, manifestó su compromiso con el MAE para coordinar acciones. “En esta presentación vi que los proyectos planteados son beneficiosos para la comunidad. Nosotros trabajaremos y fortaleceremos las acciones interinstitucionales a favor de toda la población del cantón”.

Juan Carlos Dueñas, director técnico del PRAS, invitó a la ciudadanía a  comprometerse con la implementación de cada uno de los proyectos. “Es necesario que la gente se apropie de este plan de trabajo y participe de manera mancomunada con las autoridades cantonales y parroquiales para que puedan monitorear los avances”.

El Plan de Reparación Integral de Tenguel – Camilo Ponce Enríquez se construyó como una herramienta para la aplicación de la Política Pública de Reparación Integral, la cual busca la gestión de pasivos ambientales a través de la restitución de los derechos de la naturaleza y de más de 30.000 personas que habitan en la zona de estudio. El área intervenida tiene una superficie de 49.826,81 hectáreas, las cuales han sufrido afectaciones por la minería y el desarrollo de la agricultura. (I)

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

El Telégrafo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media