El tránsito y falta de parqueos alejan del centro a los clientes
Los negocios y las oficinas del centro de la ciudad cierran gradualmente. Los propietarios de locales y transeúntes señalan como las principales causas el congestionamiento y la escasez de estacionamientos en esa zona del cantón.
Por este motivo, el denominado Comité Cívico Pro Centro de Guayaquil (Ccpcg) organizó, el pasado martes, un encuentro con varias agrupaciones de la ciudad con el objetivo de ‘rescatar el centro’.
En la cita, que participaron la Cámara de Comercio de Guayaquil, Cámara de Turismo del Guayas y la Asociación de Importadores y Comerciantes de Guayaquil, estos colectivos propusieron al Cabildo porteño que se construyan más estacionamientos para que se reactive el comercio como en antaño.
Una de las situaciones criticadas en el casco comercial, y que aumenta los atascos, es la presencia de automotores municipales que ocupan varias cuadras para estacionarse.
Ante este caso, Nelson Guim, titular de la Ccpcg, propuso que dichos automotores tengan sus bases fuera de la zona.
“Si el parque automotor aumenta, los sitios de estacionamiento disminuyen, y se cierran calles como Pichincha, la consecuencia lógica son los atascamientos que vemos a diario”.
En el perímetro que conforman las calles Olmedo, Colón, Machala, Julián Coronel, Rocafuerte, Loja y Malecón, hay locales comerciales que han cerrado sus puertas hace varios años, incluso, algunos no funcionan por más de una década.
Asimismo, otra de las peticiones que surgieron del encuentro es que en los parqueaderos existentes se implementen sistemas de tiquetes. Aquello, según Guim, haría más dinámicos los espacios. “Impulsaría la construcción de edificios de estacionamientos”.
En cambio, otros comerciantes de la zona culparon al sistema de transporte municipal Metrovía como uno de los factores, que agravó el incremento y lento flujo vehicular, que aleja a los visitantes y a los compradores.
Mauricio Cardona, quien confecciona ropa en las calles Sucre y Pedro Carbo, recordó que las ventas se redujeron en el área, casualmente, desde que funciona ese servicio.
En dicha intersección, la circulación de los articulados en un carril exclusivo resta espacio al ingreso de los vehículos particulares. “Antes pasaban buses, pero compartían la calle con carros más pequeños”.
De su parte, Alicia Arias, propietaria de una joyería, manifestó que transitar en vehículo por esos puntos implica retrasos de entre 10 y 20 minutos. Clemente Ballén, 10 de Agosto, Colón, García Avilés y Pichincha son algunas de las calles en las que se observan ese tipo de problemas. “Hay que tener suerte para estar en una zona con parqueos, pero es difícil porque las calles son angostas”.
Por esos obstáculos, el Ccpcg convocó a los empresarios y microempresarios a formar parte de la agrupación para elaborar propuestas que permitan la revalorización de la zona.