Publicidad

Ecuador, 27 de Septiembre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

EL MANABITA LUIS VINCES CUENTA CÓMO SE ADAPTÓ A LA CIUDAD DONDE AHORA VIVE Y TRABAJA

El amor al trabajo y la comida autóctona definen a la cultura del montubio

Luis Vinces, oriundo del cantón 24 de Mayo (Manabí), tiene su propia parcela que piensa utilizar en un proyecto de capacitación dirigido a los hombres y mujeres de Monte Sinaí, en Guayaquil. Foto: José Morán
Luis Vinces, oriundo del cantón 24 de Mayo (Manabí), tiene su propia parcela que piensa utilizar en un proyecto de capacitación dirigido a los hombres y mujeres de Monte Sinaí, en Guayaquil. Foto: José Morán
11 de octubre de 2015 - 00:00 - David Guerrero

“En mi familia, la mayoría va a preferir que se la invite a una buena parrillada en lugar de comer pizza”, comenta sonriente Luis Vinces (53 años), un montubio que reside en Monte Sinaí desde 1994.

Conoce el lugar desde mucho antes de que personas provenientes de otras provincias comenzaran a adquirir pedazos de tierra para vivir.

Para Vinces, al menos el 60% de los habitantes de Monte Sinaí (9.600 familias) pertenece a la cultura montubia y como prueba señala algunos predios donde se observan cultivos de plátano y choclo, además de la crianza de reses y otros animales de granja.

La situación representa razón suficiente para que el ciudadano se refiera al sector como “la capital montubia de Guayaquil”.

La llegada a la urbe porteña se dio por sugerencia de una amistad que citó al cantón como “el lugar ideal para sacar adelante cualquier empresa”.

Los inicios de Vinces se remontan al recinto Los Palmares,  cantón 24 de Mayo, en Manabí, donde fue el menor de 12 hermanos. “Una época en la que las familias preferían ser numerosas y era raro encontrar a una con solo 5 miembros”, sostiene.

Mientras camina en medio de la maleza que hay en su propiedad, recuerda los días en que asistía a la escuela Juan Montalvo, único establecimiento educativo para su comuna.

Para llegar hasta el plantel  había dos formas de movilización: en caballo o en mula. Además, solo tenían un profesor que asistía los 5 días laborables.

Mientras tanto, los 12 hermanos ayudaban en tareas de agricultura, como alimentar al ganado. La jornada comenzaba a las 04:00. La disciplina que implicaba cumplir con los estudios y la familia es algo “que moldea el carácter de las personas porque se aprende, desde muy pequeño, a ser responsable”.

Convivir con “malos vecinos” fue otra de las situaciones que afinaron el instinto de supervivencia de Vinces. Incluso actualmente, algunos de los conflictos son resueltos a punta de machete y rifle. Si existía alguna familia inconforme con la presencia de alguien “había que tomar precauciones y aún más en la noche”.

Durante las rondas con linterna en mano, la primera recomendación era no apuntar la luminaria hacia el frente sino hacia un costado. De esta manera, “si alguien disparaba, era menos probable que te atinara”.

Los estudios secundarios de Vinces marcaron otra etapa de su vida, pues tuvo que alejarse de su hogar para establecerse en la cabecera cantonal de 24 de Mayo, donde se inscribió en el colegio técnico Paulo Emilio Macías Sabando.

Con 12 años y pese a sus amplios conocimientos de agricultura, tuvo algo de recelo por estar en un sitio poco conocido. La primera opción para acceder a dinero fue lustrar zapatos a empresarios y hacendados.

Pero fueron precisamente sus habilidades adquiridas en el campo las que le permitieron ver nuevas opciones para sobrevivir y costear sus estudios.

Una de ellas fue construir pequeños puentes de madera para que las personas que trabajaban en las oficinas puedan llegar hasta sus sitios de labores sin necesidad de meterse en el lodo de la estación invernal.

Otra fue colocar estacas en un terreno baldío donde Vinces amarraba y cuidaba a los caballos de las personas que los usaban para movilizarse.

Durante la época de secundaria también comenzó a conocer gente que lo involucró con el negocio de los palets (bases de madera usadas para transporte y almacenaje).

Sin embargo, sabía que para empezar con una empresa se requería algo más que voluntad para trabajar.

Empresas en dos provincias

Vinces concluyó sus estudios de Bachillerato y se graduó como técnico agropecuario, lo que en primera instancia le sirvió para  empezar con sus propios cultivos de cacao y café.

Casi paralelamente se presentó la oportunidad con los palets, por los que obtenía hasta un dólar de ganancia por cada uno. “En un día llegaba a vender 5.000, así que el margen de ganancia era bastante generoso”.

A mediados de la década de 1980 comenzó sus estudios en  la Facultad de Economía de la Universidad de Guayaquil, donde años después saldría como economista.

En el transcurso de la instrucción académica, Vinces reconoce que poco a poco perdió esa dicción llena de arcaísmos y barbarismos típicos, como cuando dicen ‘sube arriba’ ‘ven acá’, ‘dentro adentro’, términos propios de los montubios.

Sin embargo, no reniega de sus raíces porque la naturaleza de su grupo étnico es orgullosa e irreverente y de carácter fuerte.

En 1994 decide instalar su empresa de palets en Monte Sinaí, casi una década después de que comenzaron a llegar los primeros asentamientos que se dieron con la inauguración de la vía Perimetral.

Alguna amistad le advirtió que el terreno donde Vinces puso atención podría resultar conflictivo, “pero el montubio no es tal, si no sabe arriesgar”.

Para ese momento ya se estableció un gran contraste entre la imagen de un ciudadano con buenos ingresos económicos  y la del sencillo joven que debió ganar su sustento con el primer trabajo que encontrara.

Festival del rodeo montubio

Desde 2008 Vinces decidió implementar -como homenaje a las fiestas julianas y octubrinas de la ciudad- un festival de su etnia en el mismo lugar donde se estableció fuera de su provincia natal. En cada una de las presentaciones se invita a gente de otras  provincias y países.

Además de brindar un espectáculo en el que anualmente se espera la asistencia de entre 8.000 y 10.000 personas, lo recaudado sirve para apoyar a gente de escasos recursos económicos.

Al ser consultado sobre lo que define al montubio, Vinces no duda en señalar la gastronomía, la cual también hace presencia en el festival con platos elaborados a base de maíz.

Una de sus aspiraciones es contar con un centro de diversión turístico y potenciar la iniciativa de tal manera que incentive la asistencia de extranjeros para que conozcan las raíces y costumbres guayaquileñas.

Aún prefiere la comida cocinada con leña y el plátano verde de principal ingrediente. Mucha gente, comenta, tiene tendencia a lo fácil, como las comidas rápidas, “cuando se puede vivir sano tan solo comiendo lo que uno mismo cosecha”. (I)

Datos

 Luis Alejandro Vinces Yoza nació el 27 de febrero de 1962 en el recinto Los Palmares. Gusta de los caballos, el rodeo montubio y juegos tradicionales.

El cantón 24 de Mayo está ubicado en el sur de Manabí y fue establecido el 15 de febrero de 1945, durante la presidencia de José María Velasco Ibarra.

El sector de Monte Sinaí en Guayaquil está ubicado al noroeste. Comenzó a poblarse en 1987 y está habitado por 19.447 personas, según el censo de 2010.

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

El Telégrafo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media