El adoquinado de la regeneración no resiste el tránsito
El adoquinamiento de las calles, que coloca la administración socialcristiana, presenta un evidente desgaste y deterioro en el centro y en el norte del cantón.
Bloques rotos y hundidos son los principales problemas que se observan de forma recurrente en esos sectores. Congestionamiento vehicular, daños a automotores y riesgos a los peatones son parte de las consecuencias.
En la avenida 9 de Octubre, en la intersección de Los Ríos, Rumichaca y Quito, se presentan esos inconvenientes. Allí, donde antes había adoquines se observan agujeros y los bloques, que cubrían ese lugar, yacen en media calle.
Este mismo inconveniente se repite, con frecuencia, en la 9 de Octubre y Carchi, al pie del Museo Presley Norton, donde los bloques se remueven con facilidad con el paso de los buses.
En el cruce de 9 de Octubre y Tulcán, los peatones se quejan de los desniveles, ya que es fácil tropezar. Así, lo confirma el peatón Alberto Varela, quien labora por el sitio. Vecinos del sector afirman que el Cabildo cambia o recoloca, frecuentemente, las piezas por donde circula la Metrovía.
Precisamente, hace cinco meses arregló las intersecciones de Rumichaca, García Avilés y Pedro Carbo (en el centro). Los ciudadanos que le escriben al alcalde Jaime Nebot, en su página de Facebook, cuestionan que se siga cubriendo la calle con este tipo de piedras.
En el portal, Gustavo Cornejo reportó daños del elemento cerca del Guayaquil Tenis Club (9 de Octubre y Lizardo García). “Es bueno que se hagan obras, pero es mejor que duren más de un año sin dañarse”. También, en 6 de Marzo y Maracaibo hay desniveles.
En el norte, en la calle Víctor Emilio Estrada, el material cubre un tramo de siete cuadras. Pero a la altura de la Dátiles, los vehículos que transitan pulverizaron los adoquines que se salieron del sitio.
El Cabildo, como una solución temporal, colocó una capa de cemento para evitar la formación de zanjas. Según Tania Logroño, comerciante del sitio, los buses evitan pasar por el lugar.
La zona es bastante transitada, debido a la existencia de complejos comerciales, restaurantes, bares y discotecas.
En cambio, en el barrio Centenario (en el sur), donde hasta hace poco residía el alcalde y por donde no ingresan los buses, no se presentan daños.
De acuerdo con algunas cifras del Cabildo, se invirtieron más de $ 700.000 en el mantenimiento de las obras de regeneración en la 9 de Octubre, entre 2005 y 2006.
¿Por qué se dañan los adoquines? Arquitectos e ingenieros civiles coinciden en que las deficiencias son a causa de problemas de compactación del terreno. Esto es que el constructor no realizó un trabajo 100% efectivo.
Además, para Rubén Muñoz, representante de la Sociedad de Arquitectos Paisajistas del Ecuador, el adoquín es un material menos resistente que el hormigón o el pavimento. “El de mejor durabilidad es el hormigón”.
Por su parte, Roberto Cassis observó que no se consideró el paso de los buses y tampoco hubo un trabajo coordinado con la Comisión de Tránsito del Ecuador para el desvío del transporte, es decir, que el material colocado no soporta el tráfico pesado.