Dos incidentes en una semana cierran el José Joaquín de Olmedo
Las operaciones en el aeropuerto internacional José Joaquín de Olmedo (JJO) de Guayaquil fueron suspendidas nuevamente la noche del pasado sábado debido a que un avión de la aerolínea venezolana Avior perdió pista al aterrizar.
El percance se produjo cerca de las 23:00 y, según la Dirección General de la Aviación Civil (DGAC), la aeronave excursionó alrededor de 20 metros.
El Boeing 737-400 de matrícula YV3158 cubría la ruta Barcelona-Caracas-Guayaquil y, según la referida institución, los pasajeros salieron ilesos y la nave no sufrió daños. El percance provocó que otros aviones sean desviados a aeropuertos alternos.
Carlos Álvarez, director de la Dirección General de la Aviación Civil, encabezó el Comité de Operaciones de Emergencia (COE), que se reunió para solventar el percance.
El Boeing 737-400 fue remolcado y, cerca de la 01:00 de ayer, se retomaron las actividades en la terminal.
“Aeropuerto Internacional José Joaquín de Olmedo apto para las operaciones aéreas. Aeronave que excursionó de pista fue remolcada. #COE se desactiva en este momento”, publicó Álvarez en Twitter.
Este es el segundo incidente ocurrido la semana anterior, ya que el lunes 26 de febrero, la estación aérea fue cerrada en sus operaciones debido a la caída de dos personas del tren de aterrizaje de un avión de la aerolínea Latam que iba con destino a Nueva York.
La DGAC conformó un grupo de inspectores que el pasado jueves y viernes realizaron trabajo de campo en la terminal aérea para indagar qué pasó en este caso donde se presume pueda tratarse de coyoterismo.
Según Nicolás Larenas, analista aeronáutico, los hechos son aislados, pero “sí lo pone al aeropuerto en una situación incómoda ante autoridades tanto locales como ante la Administración Federal de Aviación (FAA) de los Estados Unidos, esa es la única preocupación de todo esto, más en el caso de los muchachos de Cañar”.
Categoría no peligra
Con respecto a la categoría que tiene el JJO como Mejor Aeropuerto de Latinoamérica y el Caribe otorgada por el Consejo Internacional de Aeropuertos (ACI), Larenas mencionó que este simplemente es un reconocimiento que hace una empresa que realiza esas calificaciones y no lo afectaría.
“LA FAA seguramente está muy pendiente de lo que pasó con los jóvenes de Cañar ya que no es normal y no puede volver a pasar”.
En referencia al Avior dijo que la pista de Guayaquil estaba “contaminada”, es decir que había mucha agua acumulada por la lluvia y, pese al peso que tienen los aviones, cuando topan las llantas contra la pista no hay la adherencia requerida para el frenado. “En ese caso el frenado se extiende más de lo normal”. (I)