D’Danilo deleita a clientes del sur con sazón criolla
Son las 10:00 del jueves y en la esquina de Ambato y Colombia, en el centro-sur de Guayaquil, hay un intenso movimiento. Decenas de personas llegan hasta la picantería D’Danilo, un restaurante que durante 30 años se ha especializado en recetas que tienen como base el producto costeño.
El negocio comenzó en un quiosco que estaba ubicado en la esquina opuesta a la actual.
Jairo Antepara recuerda que su padre, Sergio Danilo Antepara, comenzó la microempresa vendiendo encebollado y cazuela de pescado. Pero ante la insistencia de uno de sus clientes decidió servir encebollado con arroz, es así que sus comensales se encantaron, entonces, con la inusual combinación.
Los consumidores comenzaron a solicitar más platos y así la carta aumentó. Ahora está integrada por caldo de bagre, encebollado de albacora, ceviches de camarón y pescado, cazuela, bollo, guatita y los tradicionales secos.
La batuta del negocio la tienen los hombres. Antepara cuenta que el jefe de cocina por años fue su padre, pero luego le cedió el mando a Wilmer, un joven cocinero que se ganó el puesto por su sazón.
Jairo Antepara reconoce que el toque especial de los cocineros ha logrado atrapar a los clientes que llegan por decenas diariamente. Los ingredientes frescos y la dedicación del equipo de trabajo son las principales características del negocio.
En el local es tradicional observar un fogón con una cacerola de barro, en la que se cuece la cazuela de pescado.
El administrador dice que las recetas que se venden en el negocio de su familia son preparadas de la forma tradicional, por lo cual conservan los sabores de antaño.
Allí llegan los comensales desde el norte y sur de la ciudad. Antepara cuenta que su clientela es diversa y todos vienen en busca de la sazón criolla, que ha caracterizado al negocio por años.
La picantería está abierta desde las 07:00 hasta las 13:00. Pero la cocina de D’Danilo se prende desde las 05:00 que es la hora que se comienzan a sazonar y picar los ingredientes de la carta que ofrecen los siete días de la semana.
Los sábados y domingos son los días que más gente llega. Antepara comenta que solo los sábados reciben un promedio de mil pedidos, ya que la carta incluye el caldo de gallina y las banderas, que son la fusión de cazuela, con un tipo de ceviche y otra de seco, todo esto acompañado por arroz.
Entre los planes del propietario está que el negocio se desarrolle. Por lo cual planean abrir en noviembre un nuevo local en el norte de Guayaquil. Explican que su segunda picantería estará ubicada en la Alborada, porque muchos de sus clientes vienen desde ese sector en busca de la sazón de D’Danilo.
Señala que antes tuvieron una sucursal que la administraba la familia, pero después de varios meses decidieron cerrarla para fortalecer la matriz e incorporar nuevas recetas a la carta.
La picantería D’Danilo atiende pedidos a domicilio hacia todos los sectores de Guayaquil, pero tiene un recargo adicional.