Desde hace cuatro meses la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM) trabaja en el proyecto de bicicleta pública para Guayaquil, que pretende volver accesible esta modalidad de transporte e implementar los espacios requeridos para ello.

Durante el proceso los colectivos de ciclistas colaboraron con ideas e impresiones para crear una iniciativa que solicitan hace años.

Aunque los representantes de estos grupos están optimistas con los avances, en las calles los ciudadanos que utilizan la bicicleta como herramienta de trabajo o modalidad de transporte todavía están escépticos.

Personas como Gustavo Miranda, habitante de El Cisne 2, no conocía detalles del proyecto de la ATM. Al ser informado al respecto muestra incredulidad.

Según Miranda, lo básico para que funcione una iniciativa es que haya espacios seguros para circular. “A menos que creen calles exclusivas, no servirá, ya vio cómo terminaron los carriles que pintaron en el centro”, lamentó el ciudadano.

En el sur también muchos prefieren no ilusionarse. Jacinto Espinosa Vera, cotidianamente realiza un recorrido desde su casa en la Cdla. Sopeña para ir a su trabajo, ubicado en el barrio del Centenario.

De primera mano, conoce que solo cruzar la Av. 25 de Julio resulta una proeza. “A diario debo intercambiar insultos con tipos (conductores) que no respetan ni el paso cebra”, aseguró.

Por su parte, los colectivos ciclistas dan ideas sobre la dirección que debe tomar el proyecto municipal. Por ejemplo, Masa Crítica sugiere crear circuitos para conectar puntos como la Metrovía. Y poner estaciones seguras ahí. (I)