El ultimátum fue dado por la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM) de Guayaquil el miércoles de la semana pasada: Los buses que no cuenten con revisión técnica o dispositivo GPS para cuando termine el siguiente mes serán retenidos.

Ha pasado casi un año desde que la institución, en coordinación con cooperativas locales, implementó el Sistema Integrado de Transporte Urbano (SITU) que regula las rutas y el servicio.

 Sin embargo, no todos los choferes han acatado las disposiciones de la ATM.

Según cifras de la entidad,  solo el 25% de las 2.435 unidades registradas han cumplido con la revisión técnica por dos ocasiones, el 47% la hizo una vez y el 28% no participó del proceso.

En cuanto al GPS, solo el 20% no ha instalado el dispositivo que sirve para que la plataforma de la ATM compruebe si los buses respetan las paradas del SITU.

Los controles se iniciaron desde este mes y ya registran 50 buses retirados de circulación por no cumplir con los requisitos requeridos para dar un buen servicio, informó Luis Lalama, jefe de operaciones de la ATM. Lo que ocurrirá desde marzo “es que acudirá a las mismas cooperativas para intensificar los operativos”.

En rutas como la 6 y 61, que cubren el suburbio, ya los usuarios notan que hay menos unidades.

Rosa Segura, habitante de Jardines del Salado, admite que muchas merecían ser retiradas “pero tampoco pueden dejarnos sin buses”.

Sobre este particular, Andrés Roche, titular de la ATM, afirmó que como parte de la consultoría efectuada hace casi dos años sobre el servicio de transporte urbano se contempló un contingente para estas eventualidades. “No va a existir una escasez de unidades”.

Además anunció que dentro de un mes se implementará un sistema para controlar que los choferes utilicen correctamente las puertas de entrada y salida. (I)