450 casas serán retiradas de la ribera del Estero Salado

La Secretaría Técnica de Prevención de Asentamientos Humanos Irregulares (Stpahi) efectuó, el viernes anterior, un recorrido por  el suburbio oeste para advertir a la comunidad que   este miércoles  está previsto iniciar el retiro  de 450 casas asentadas en la ribera del Estero Salado.

La comunicación se hizo, mediante perifoneo, en los sectores   El Cisne y La Colmena, en horas de la tarde. En la zona  se   observó que decenas de viviendas ya estaban abandonadas y, en algunos casos, habían sido demolidas por los mismos habitantes.

Las familias que saldrán de la zona serán reubicadas en el proyecto Socio Vivienda 2. Sin embargo, algunos moradores manifestaron inquietudes sobre las nuevas casas y si estas responderán a sus necesidades habitacionales, es decir, si el tamaño de los inmuebles será el adecuado para un determinado número de personas.

Otros, en cambio, tienen dudas respecto del trámite para retirar las llaves de los nuevos inmuebles: cuándo vence el plazo, completar requisitos del Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda (Miduvi), entre otras observaciones.

Kléber Acosta, de Cisne 2,  tiene 20 años viviendo a orillas del estero en una casa esquinera. La ubicación de su propiedad, y la construcción de la segunda planta, le ha permitido tener espacio suficiente para tres familias.

“Lo único que estoy pidiendo es que mi nueva casa tenga el mismo privilegio de ser esquinera”, dijo.
 Para algunos, el cambio significa  pérdida por la inversión realizada en la mejora de sus propiedades.
Para otros, como Mario Quiñónez, representa una ventaja porque las estructuras son edificadas  en base a caña y madera.

El ciudadano, con cerca de  30 años en el sector, solo tiene dudas sobre el modo de financiamiento para adquirir los inmuebles otorgados por el Miduvi. “Yo ya estoy listo para salir... pero espero que en el futuro no se aumenten los intereses de las cuotas”.

Alberto Fariño, quien tiene una discapacidad auditiva, subsiste con un negocio de venta de encebollado y consultó a las autoridades si tendrá facilidades para realizar esta actividad en Socio Vivienda 2. La respuesta del personal del Miduvi, presente en el recorrido de la Stpahi, fue afirmativa. “Ahora solo esperemos que no haya demasiada competencia y exista buena clientela”.

Grace Quiñónez mostró algo de temor por el aviso de la destrucción de las casas debido a que, hasta la semana pasada, no había recibido  las llaves  de su nueva propiedad. “Desde que realizaron  un censo, hace como un mes, me tienen en espera para retirar las llaves”.

Palmira Castillo, de la 16 y la P, cuestionó que el Miduvi no reconozca un poder de su progenitora para que un familiar pueda retirar la llave. “Mi madre no se puede mover y no nos han dado solución. Ahora nos dicen que vayamos este lunes para solucionar el problema. Esperemos que sea cierto”.