La Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR) adelantó que las zonas bajas del cantón anegadas por las lluvias en 2013 son susceptibles de inundarse, nuevamente, con las precipitaciones del presente año.

Al ser consultada sobre el tema la titular de la cartera de Estado, María del Pilar Cornejo, advirtió en días pasados que el problema se puede repetir, porque no se han observado mayores cambios por parte del Municipio de Guayaquil.

Nueva Prosperina, la Florida, Monte Sinaí, entre otros barrios urbano-marginales, son algunos lugares que evidenciaron vulnerabilidad y en los que aún hay riesgos. “Tenemos identificadas las zonas sin cobertura de alcantarillado y agua potable. Sin embargo, queremos que la ciudadanía sepa que estamos prestos a ayudar en emergencias como se hizo anteriormente”, explicó la funcionaria.

Pero el sábado 2 de marzo del año pasado, tanto la zona urbana como los sitios periféricos del cantón se inundaron por la fuerte lluvia que cayó. Ese día varias casas se derrumbaron, hubo árboles derribados y vehículos cubiertos por el agua estancada.

Nueva Prosperina, Flor de Bastión, Monte Sinaí, Los Ceibos, la Alborada, Sauces, Las Orquídeas, Los Vergeles, Av. Francisco de Orellana, la vía a Daule, Bellavista fueron varias de las zonas más perjudicadas por lo que la urbe fue declarada en emergencia.

En la mencionada fecha, la Empresa Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Emapag EP) informó que el colapso del sistema de desfogue en ciertos sectores se produjo porque coincidió con la lluvia intensa, la marea alta y el aguaje.

El Inamhi proyectó que de enero a marzo las precipitaciones se regularizarán en el Litoral.

En ese entonces, Andrés Mendoza, presidente del directorio de Emapag, aclaró que Guayaquil es muy baja, “como Miami, Buenos Aires y Nueva York”, que cuando ocurren estos fenómenos se inundan”.

Los vecinos de Nueva Prosperina todavía no conocen lo que es el servicio de alcantarillado ni la pavimentación. “No asoma por ningún lado”, afirmó Carlos Gálvez, de la manzana 1057.

En el último invierno, la fuerza de la corriente de agua que se formó destruyó un muro de 70 cm construido para evitar que la casa se inundara. “Ahora la hice de un metro, esperemos que resista esta vez”, agregó.

De otro lado, las familias que habitan cerca de un canal en la Florida solicitan que los ductos que conducen el agua sean más anchos para que el desfogue sea rápido.

Jorge Rodríguez, residente de la manzana 610, comentó que la única obra preventiva que han recibido es la recolección de la basura.

Al respecto, Cornejo recordó que la SNGR ha indicado en algunas ocasiones, tanto a la Corporación de Seguridad Ciudadana como al alcalde de Guayaquil, las obras que son necesarias en la ciudad.

Un reporte público de Emapag, de agosto pasado, precisó que el 88% del cantón tiene alcantarillado.

El área con menos cobertura, según el informe, es la zona del norte al oeste de la ciudad (cooperativas próximas al proyecto Multipropósito El Fortín, al pie de la vía Perimetral). Solo el 15% del lugar (1.686 hectáreas) contaba con la cobertura.

La otra área es la del norte al este del cantón (cooperativa Limonal, Juan Pablo II, Los Vergeles, Bastión Popular, Mapasingue Este y Prosperina Alta. En esta zona (1.745 ha) había un 93% de cobertura.

Sin embargo, hasta esa fecha, Monte Sinaí, en el noroeste, no constaba en el mapa de los sectores en los que el Cabildo instalará el servicio.

A pesar de esto, el alcalde Jaime Nebot ha mantenido en sus últimas cadenas radiales que desde finales de 2014 hasta inicios de 2015 en todo Guayaquil habrá alcantarillado. El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi) dijo que de enero a marzo las precipitaciones se regularizarán en el Litoral y que su intensidad estará dentro de los valores normales, lo que no significa ausencia de lluvias.