Al inicio del milenio, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) puso una meta a sus países miembros: Hasta 2015 la cobertura de agua potable debía ser el 100%.

Tres años después, a Guayaquil le falta el 4% para completar la tarea. Aunque Andrés Mendoza, presidente del directorio de la Empresa Municipal de Agua Potable (Emapag), puntualizó que el 100% de cobertura se alcanzó en 2012 “de lo que hasta ese momento era la línea de servicios otorgada por el Municipio y reconocida por el Gobierno Nacional”.

El 4% que falta corresponde a Monte Sinaí, donde en la actualidad se ejecutan obras para completar la meta solicitada por la ONU hace casi 20 años.

Mendoza indicó que muchos países, incluido Ecuador, no cumplieron la meta. La ONU planteó 2030 como nuevo plazo tanto para el agua potable como para el alcantarillado.

Teniendo esa disposición presente, 17 delegaciones de países miembros de la Asociación de Entes Reguladores de Agua Potable y Saneamiento de Iberoamérica (Aderasa) se reúnen en Guayaquil para establecer propuestas, con la finalidad de optimizar el manejo integral de los recursos hídricos.

En el caso de Guayaquil, la responsabilidad también recae en los cantones aledaños a la cuenca hidrográfica de Guayas. Lo sostienen tanto la Emapag como la Prefectura de la provincia.

Para el argentino Oscar Pintos, presidente de Aderasa, también corresponde a las secretarías de Estado pertinentes garantizar el manejo responsable del recurso. “El Estado debe garantizar el total acceso al agua”, manifestó. (I)