Una tarifa diferencial de 4 centavos por kilowatio/hora (kw/h) para el transporte urbano eléctrico es la propuesta de la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM) de Guayaquil para la Agencia de Regulación y Control de Electricidad (Arconel).

La idea fue presentada durante la inauguración de la primera electrolinera de Guayaquil que se construyó en el parque Samanes, del lado de la autopista Narcisa de Jesús, al norte de la ciudad.

La propuesta de la ATM es que la Arconel reforme el pliego tarifario de tal manera que se incentive el uso de vehículos eléctricos.

Por ahora, el valor de la tarifa eléctrica nocturna para buses y taxis que operan bajo esta modalidad es la misma que para el sector industrial, es decir, 8 centavos por kw/h, según consta en la página de la Arconel.

“El verdadero incentivo va a estar si aplicamos un valor de al menos 4 centavos”, aseguró Andrés Roche, gerente de la ATM.

El funcionario sugirió que no debería existir recargo en la facturación por la demanda de la energía que se generará en las electrolineras.

Adicionalmente, se planteó implementar un mecanismo para que quienes presten el servicio de carga puedan compensar el IVA en la compra de energía.

“Es decir, que al usuario de la carga, en este caso el transportista, no se le pueda trasladar el IVA, innecesario por cierto, más aún cuando el transportista no puede trasladar ese IVA al usuario”, indicó Roche.

Eventualmente, aseguró el titular de la ATM, estos incentivos se traducirán en ahorros al Estado por concepto de subsidios para los combustibles.

La propuesta fue realizada al vicepresidente de la República, Otto Sonnenholzner, quien estuvo presente durante la entrega de la electrolinera junto a la alcaldesa de Guayaquil, Cynthia Viteri, entre otros funcionarios.

Por otra parte, la ATM informó que está lista la ordenanza que será presentada al Concejo municipal para viabilizar incentivos económicos para la adquisición anual de 30 buses eléctricos, además de taxis.

Los aportes del Cabildo serán de $ 15.000 para buses y $ 4.000 para taxis. Esto representaría un desembolso total de $ 850.000 por parte del Municipio.

La ordenanza también incluirá exoneraciones tributarias y exigencias para las infraestructuras para que implementen espacios para la carga de estos automotores.

Por lo pronto, existen 50 taxistas interesados en sustituir sus unidades por vehículos eléctricos.

En cuanto a la electrolinera, tiene 20 cargadores para atender igual cantidad de vehículos. Se estima que diariamente se podrá recargar a 500 automotores, aseguró Jorge Burbano, gerente nacional de la empresa china BYD, responsable de la construcción y operación de la electrolinera.

Burbano explicó que los dispositivos de carga se diferencian de otros disponibles en centros comerciales por su potencia y velocidad. “Un auto puede cargar al 100% en 1,5 horas y un bus en 3,5 horas”, indicó.

Por su parte, el vicepresidente Sonnenholzner resaltó el trabajo conjunto entre el Gobierno nacional, Municipio, empresa privada y transportistas para propiciar un cambio en la movilidad.

El segundo Mandatario adelantó que se realizan gestiones para ampliar el acceso a créditos para quienes deseen adquirir unidades de transporte eléctrico.

Los usuarios de la electrolinera podrán acceder al servicio gracias a una aplicación para dispositivos Apple y Android, que servirá para simplificar el pago. (I)