La Copa América me atrapó desde el principio. Quizá porque hay más selecciones, quizá porque el nivel futbolístico es bastante parejo, quizá porque hay partidos muy lindos para ver. Particularmente me encanta ver a Messi en acción, juegue bien o mal, siempre me llena los ojos. Argentina hace 23 años que no sale campeón de un torneo  internacional, mucho tiempo de sequía  para una selección que tiene jugadores de jerarquía que son figuras en todas partes del mundo. La Albiceleste es el principal candidato para salir campeón, pero antes de eso va a tener que jugar con la sorprendente Venezuela, a la que  Dudamel le ha dado carácter y buen toque de balón.  Pero si Messi y Argentina no ganan el título en Estados Unidos, no me interesa, me interesa verlos jugar bien. Los verdaderos amantes del fútbol no solo disfrutan el resultado, sino también el juego, la táctica, la estrategia.  Cuando hablo con los amigos de Argentina sobre la Copa, la fase de grupos y los cuartos de final, siento poco entusiasmo en ellos, quizá porque lo único que les interesa, como a  la mayoría de los argentinos, es que terminen esos 23 años de sequía. Argentina va a estar siempre peleando por la calidad de jugadores que tiene. A veces se ve tan fácil de afuera pero para el jugador nada es fácil; uno prende la televisión y dice que Argentina va a ganar. Me dio mucha bronca que el técnico de Bolivia le haya puesto una marca personal a Messi, esas cosas me molestan, no me gustan, porque creo que el fútbol es otra cosa, no marcar 45 minutos a un solo jugador. Hay otros argumentos, otras salidas para conseguir resultados.   

De chico me gustaba como jugaba Perú, porque era una selección que no tenía grandes jugadores a escala mundial, pero jugaba bien, aunque no conseguía nada. En las últimas dos Copas América, Perú ha jugado bien, obviamente se le pide menos que otros combinados, pero me gusta el planteo de Gareca.  

Me gusta que muchos técnicos van para adelante. Creo yo que las otras selecciones que han clasificado piensan más en el arco rival que en el propio, eso es muy bueno y ojalá que salgan buenos partidos. En sí, los sistemas son todos muy parecidos, que les gusta jugar bien al fútbol. No hay equipo que le guste tirar solo pelotazos; podrán dar pases largos, pero pelotazos sin criterio no he visto.

Argentina se ve bien, y parece que los demás equipos se defienden, pero si vemos cuando no tiene el balón presiona.

Muy pocas selecciones pueden hacer el trabajo de presión arriba, quitarla y jugar; por eso siempre dicen: “la defensa falló”. Pero para que falle la zaga es porque queda muy expuesta a la hora de presionar el mediocampo, es lo que ha  ocurrido con Ecuador en la Copa y en las eliminatorias. (D)