Los empleados del complejo Ney Mancheno Velasco de Deportivo Quito, ubicado en el sector capitalino de Carcelén, no han cobrado sus haberes de 21 meses  y además de 4 sobresueldos.

Así lo explicó ayer uno de los empleados que prefirió mantener en reserva su identidad.   

Sobrevive gracias al trabajo de su esposa, pues a él ya se le acabaron los ahorros. Esa fuente comentó que tiene inconvenientes en los bancos, con su arriendo y en el pago de los servicios básicos y los préstamos.  

Una de las ideas que tiene para cobrar su dinero es presentar demandas en el Ministerio de Relaciones Laborales, pero todavía no lo hace, pues este trámite requiere de procedimientos que aún no están establecidos, según le informaron funcionarios de esta cartera de Estado.  

Confían en que haya algún tipo de arreglo con la nueva directiva de Joselito Cobo tras la renuncia de Santiago Ribadeneira. “Si nos afirman que habrá una solución real, podremos seguir, de lo contrario pensaríamos en buscar otro trabajo. Actualmente estamos en ‘stand – by’, sin la ayuda de nadie y sin saber nada sobre nuestro futuro laboral”, comentó el trabajador del equipo quiteño.

El galeno Pablo Cisneros (foto) también sufre por los problemas monetarios de Deportivo Quito. Comentó que aparte de su trabajo como médico del club ‘azulgrana’, labora en el Ministerio del Deporte en el área de traumatología deportiva y de manera particular en un consultorio, y que continúa vinculado a Deportivo Quito por “amor a la camiseta”.

Explicó que los fisioterapistas y masajistas del equipo quiteño no gozan de un ingreso adicional y deben subsistir únicamente de sus ahorros.

La deuda con el cuerpo médico asciende a 18 meses, según se estableció en conjunto con la dirigencia del expresidente Santiago Ribadeneira. Se aceptó la moratoria por un año para poder cobrar, pero ahora el médico dijo que no tiene claro a quién o a qué institución puede reclamar ese dinero adeudado.

“Ojalá con esta nueva directiva (liderada por Joselito Cobo) se llegue a una solución definitiva, seguimos esperanzados”, expresó Cisneros.

Otro integrante del cuerpo médico del club no quiso dialogar con este Diario, pues consideró que no desaparecerán los inconvenientes monetarios al informarlos en la prensa.   

A pesar de que el equipo entrena con normalidad de cara al juego contra Emelec en el estado Olímpico Atahualpa por la 12ª jornada, se vive un ambiente de frustración e indignación por esta crisis económica, que no tiene una salida viable hasta el momento.