Marlene Ayala abandonó hace 30 años su natal Pasaje (El Oro). Llegó a Guayaquil obligada por su papá, quien quería que ella y su hermana menor estudien en la universidad. Estaban recién graduadas de bachilleres en el colegio Carmen Mora de Encalada. 

Marlene quería estudiar una carrera vinculada con el deporte. Por eso entró a la Facultad de Cultura Física de la Universidad de Guayaquil, donde se tituló como tecnóloga deportiva.

Mientras cursaba sus estudios universitarios, en 1999, Marlene se inscribió en un curso para entrenadoras de fútbol. Ese fue el inicio de una carrera exitosa que ahora la ha catapultado al banquillo de Barcelona femenino, equipo que jugará la Superliga 2020 que empieza el 7 de marzo y finalizará el 5 de septiembre.

Marlene es una de las cuatro únicas mujeres que hasta el momento dirigirán en el torneo femenino. Las otras tres son: Paulina Pino, DT del Deportivo Cuenca; Wendy Villón, DT de El Nacional; y la española Susú Cores, DT de Independiente del Valle. 

Los hombres siguen siendo mayoría en los banquillos de los equipos femeninos de Ecuador. Ocho de los 18 clubes que compiten en la Superliga tienen estrategas varones. Seis aún no designan a sus adiestradores. 

Después de aprobar el curso para entrenadora de fútbol, Marlene empezó su trayectoria en el colegio Liceo Cristiano. Allí estuvo al mando del equipo femenino durante 11 años.

Con ese equipo se colgó 58 medallas y ganó nueve trofeos. Todos los guarda con celo en un altar que armó en la sala de su casa.

En el Liceo Cristiano, Marlene encontró su vocación de formadora. Madeline Riera, goleadora de la Superliga 2019 con 44 tantos, lo confirma.

Riera le dice “mamá”. La llama así desde 2002 cuando un amigo de Madeline le dijo a Marlene que le iba a llevar a su equipo a una niña muy hábil para jugar fútbol. 

Madeline tenía 12 años y dejó perpleja a Marlene cuando la vio jugar en la primera práctica. De inmediato la DT solicitó una beca estudiantil para la niña. Pero su mamá, una mujer humilde, se opuso porque no tenía cómo pagar los $ 9 mensuales de la pensión. 

Marlene Ayala no quería que se la lleve. Había visto mucho talento en ella y quería que juegue en el equipo del Liceo. “No se preocupe, yo conozco a una persona de dinero que puede hacerse cargo de la pensión”, le dijo Marlene a la mamá de Riera.

En ese momento la adiestradora se convirtió en su tutora. Le conseguía los uniformes y los útiles escolares a cambio de que juegue en su equipo. 

Ámbar Torres, Tamara Angulo, Andrea Morán y Nicole Charcopa son otras futbolistas a las que descubrió.

El Liceo Cristiano fue su catapulta. En 2010 fue fichada por la selección ecuatoriana femenina. Fue la primera mujer que formó parte de un cuerpo técnico en la Tricolor, donde era asistente de Julio César Rosero. 

En la selección nacional estuvo año y medio. Fue parte del equipo que quedó eliminado del Sudamericano sub-17 en Brasil, donde quedaron en el último lugar del grupo A sin puntos y con 22 goles recibidos.

Luego de esa experiencia pasó a las filas de la Federación Deportiva del Guayas, donde siguió acumulando títulos en Juegos Nacionales. Allí se mantuvo ocho años hasta que en 2019 el profesor Orly Salas la invitó a dirigir las categoría sub-14 y sub-16 de Barcelona. Con esta última división se coronó vicecampeona nacional en la competencia Conmebol.

Y hace tres meses Carlos Alfaro Moreno, presidente del club amarillo, le ofreció dirigir al equipo femenino de Barcelona. Marlene aceptó el reto. (I)