Hinchas de Emelec y Barcelona se alistan para seguir las incidencias del Clásico del Astillero que hoy definirá al campeón ecuatoriano de 2014. El interés por este compromiso se vive en todas las provincias del país.

“Emelec es local cuando juega en el Capwell; Barcelona es local en casi cualquier parte del Ecuador”, dice Xavier Caiza (35 años), fundador de la Sur Oscura Quito, barra organizada que acaba de cumplir 17 años de existencia.

Según él, este conglomerado ha llegado a reunir más de 5.000 personas, quienes llenan la general noroccidental del estadio Olímpico Atahualpa de la capital, cuando el representativo ‘canario’ se presenta en ese escenario.

No obstante, son muchos menos los que se encontrarán este día para vivir las emociones del cotejo de vuelta de la final, a cumplirse desde las 16:30 en el estadio George Capwell. Los miembros de la Sur Oscura capitalina se citaron en el restaurante ‘El Antojo Manabita’, ubicado en la calle Polonia N31-26, donde hay varios televisores.

Conforme a los cálculos de Caiza, a este salón concurrirán entre 200 y 300 barcelonistas, quienes, a partir de las 16:00, comenzarán a alentar al equipo de sus amores.  

Otro punto donde los fanáticos del conjunto ‘torero’ se juntarán para ver el compromiso es el Comité de Empresa de los Trabajadores de la Empresa Eléctrica Regional El Oro, en Machala, situado en la Ciudadela del Seguro, calle Bolívar y la Diecisieteava Oeste. Los primeros adeptos ‘amarillos’ arribarán a las 14:00. También en la provincia de El Oro, pero en el cantón Piñas, se unirá un grupo de barcelonistas.

En este caso, a las 15:30, se harán presentes en el coliseo José Gallardo Moscoso, donde se instalará una pantalla gigante.  

Pero los hinchas de Emelec no se quedan atrás. Aunque no en forma de barras organizadas, grupos de hinchas se reunirán en distintas ciudades para observar el encuentro. Tal como lo hicieron en el duelo de ida, decenas de seguidores ‘eléctricos’ se concentrarán en la Plaza Foch de Quito. Paola García (29 años) dice que quedó en encontrarse con sus amigos a las 15:00.   

En Agua Clara, al norte de Quito, Gabriel Andrade (35 años) se unirá a sus amigos para prenderse del televisor desde la previa. Todos irán con la camiseta del ‘ballet azul’ y le harán barras a los hombres del director técnico Gustavo Quinteros.

Édison Loor (42 años), cuya familia es emelecista, vivirá la final desde un domicilio situado en el barrio América. Sus hermanos y cuñados lo acompañarán en el “sufrimiento”. Pese a lo difícil del duelo confían en el buen juego de su ídolo.

En Santo Domingo se vivirán ambientes similares. Carlos Ayrton Tapia (17 años) lamenta no haber conseguido entradas para viajar a Guayaquil. Eso le obligó a cambiar de planes: se juntará en casa con sus compañeros de colegio, incondicionales de Emelec, y se conectarán a la transmisión del lance. La vivienda está localizada en el sector Los Rosales. La expectativa en Costa, Sierra, Oriente y Galápagos es igual, y aunque no más de 25.000 personas ingresen al Capwell, buena parte de los 14’000.000 de ecuatorianos estarán pendientes de lo que ocurra.