La FEF decidió rescindir contrato con Full Play
El directorio de la Ecuafútbol, en su última reunión de 2015, decidió rescindir el contrato con la empresa argentina Full Play, tras 17 años.
La Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), bajo la presidencia de Luis Ch. (hoy detenido), firmó en 1998 un contrato con Full Play por los derechos de televisión y para la comercialización de los partidos que la Selección Nacional de Fútbol dispute fuera del país.
La FEF se suma a la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) que también anunció la intención de terminar sus vínculos con Full Play. En octubre pasado la dirigencia uruguaya inició un proceso judicial en contra de Full Play.
Carlos Villacís, titular encargado de la FEF, fue nombrado para que, junto a los abogados, realice todos los trámites para lograr la rescisión del contrato con la empresa argentina. Hasta el momento, ningún funcionario de Full Play ha dado su impresión ante la postura de la Federacíón Ecuatoriana.
Esta decisión se da de manera sorpresiva, ya que por varios meses la dirigencia de la FEF aseguró que no existían motivos para rescindir ese contrato.
Luis Ch. en septiembre de 2015 anunció que “el contrato con Full Play está vigente hasta el final de las Eliminatorias Sudamericanas” y que no había razones para terminar con el vínculo comercial, y que por el contrario ya se habían adelantado ciertos valores económicos.
Según Hugo Mora, tesorero de la FEF, la empresa Full Play adelantó $ 2’400.000 en 2014 como parte del contrato firmado. Estos dineros sirvieron para cancelar parte de los premios a los seleccionados que consiguieron la clasificación al Mundial de Brasil. Todos los montos económicos que la FEF recibió como anticipo de parte de Full Play se deberán devolver a la empresa.
En el último contrato -por las Eliminatorias para Rusia 2018- se habría determinado un pago cercano a los $ 9 millones para la FEF por los partidos de la selección. Álex De la Torre, vicepresidente encargado de la FEF en diálogo con un medio capitalino, reveló que por el momento desconocen el tiempo que durará el proceso para terminar el contrato con Full Play. Argumentó que eso dependerá de la buena voluntad de los actuales administradores de la empresa argentina, para que el finiquito se realice de mutuo acuerdo.
De no llegar a un arreglo, la FEF estará obligada a llevar el caso a los tribunales de justicia, por lo que el proceso de rescisión podría tomar varios meses. Incluso, según las cláusulas del contrato, un juez podría determinar que la FEF tenga que pagar ciertos valores a la empresa argentina. Esta situación fue advertida en septiembre pasado, por el asesor de la FEF, Guillermo Saltos Guale, quien aseguró que podrían existir penalizaciones si se ‘rompía’ de manera unilateral el contrato con Full Play.
Saltos Guale reveló que buscarán todos los argumentos legales para terminar con el contrato sin que la FEF tenga mayores inconvenientes. “La idea es que la federación no salga perjudicada”.
Full Play, junto a dos empresas de la región (Torneos y Competencia, y Traffic), está involucrada por la justicia de los Estados Unidos en una serie de delitos, que van desde asociación ilícita, evasión tributaria y lavado de activos. Sus principales, Hugo y Mariano Jinkis, actualmente procesados en su país, luchan por no ser extraditados a los EE.UU.
Full Play, Torneos y competencias y Traffic crearon la empresa Datisa, acusada por los EE.UU. de pagar cerca de $ 100 millones en supuestos sobornos para obtener los contratos de los derechos de TV de cuatro Copas América.
El vínculo de Full Play con la FEF pudo ser mayor a inicios de 2004, cuando ésta propuso la creación del Canal del Fútbol, para transmitir todos los partidos del Campeonato Nacional de Fútbol.
La empresa de los Jinkis llegó a adelantar unos dineros a la FEF, pero luego la propuesta quedó sin apoyo y la federación ecuatoriana tuvo que arreglar con Full Play por los montos antes recibidos. (I)
Datos
2’400.000 dólares adelantó Full Play a la FEF en 2014; este monto fue utilizado para pagar premios a los seleccionados.
Full Play SA es una empresa argentina de marketing deportivo, cuyos dueños Hugo y Mariano Jinkis están detenidos en su país. La justicia de los EE.UU. acusa a la compañía de cometer varios delitos, entre los principales están: lavado de activos y evasión fiscal.
La Asociación Uruguaya de Fútbol solicitó a la justicia de su país, dar por terminado el vínculo con Full Play, debido a que esta no tenía la capacidad para cancelar los valores correspondientes. Una jueza decidió congelar los pagos hasta que el proceso siga su curso, por sospechas de lavado. Full Play había depositado $ 1’000.000.
La Ecuafútbol decidió en su última reunión de directorio romper el vículo con Full Play a pesar de que en meses pasados varios directivos anuciaron que el contrato se mantenía firme.