El fútbol ecuatoriano vive una nueva normalidad, a la espera de que se ratifique el 29 de julio como la fecha establecida para el reinicio del campeonato. Mientras tanto, desde ayer, los equipos ya se entrenan con las plantillas completas.

Desde el 10 de junio los equipos fueron autorizados a practicar, pero divididos por grupos. Es decir, podían estar en diferentes puntos del complejo deportivo, hasta un máximo de seis elementos por grupo.

La hoja de ruta de la LigaPro avanza según lo programado, con todos los controles para que pueda volver el certamen a fin de mes. La semana pasada se registraron cero casos positivos en los equipos, entre las pruebas de covid-19 que se realizan.

Entrenar con todo el equipo significa un alivio para los directores técnicos. En la puesta a punto es fundamental, finalmente, hacer y recordar en la práctica el fútbol que mostraban antes de la paralización.

“En estos días podremos ver cómo están. En el fútbol se verá el nivel y a partir de eso armaremos el equipo, de acuerdo a lo mejor para el momento. Hay un margen corto para identificar eso”, dijo el DT de Liga de Quito, Pablo Repetto, en una rueda de prensa virtual ayer.

El uruguayo no descartó que se piense en contratar a un reemplazo de Antonio Valencia, pero con ciertas limitaciones económicas. Caso contrario lo buscará dentro del equipo.

Otro aspecto que Repetto consideró importante es jugar amistosos contra otros equipos. La LigaPro tiene previsto hacer simulacro de amistosos el 22 de julio, con todos los protocolos que se incluirán en los partidos oficiales.

Extraoficialmente se conoció que para ello se realizarán partidos entre clubes de las mismas ciudades. En Guayaquil, en el estadio Monumental, jugarán Barcelona y Guayaquil City. Mientras que en Quito, en el estadio Rodrigo Paz, Liga de Quito se enfrentará a Aucas.

Posteriormente a esos partidos se elaborará un informe sobre cómo resultó el protocolo y si está listo para ser aplicado cuando regrese el fútbol.

En el tema del calendario, se ajustará e incluso podría haber partidos todos los días, como en la liga española. Esto es debido a los torneos que se jugarán, como Libertadores, Sudamericana y eliminatorias al Mundial.

Cuatro meses de pausa

La LigaPro lleva cuatro meses de paralización, lo que significó hasta el momento una pérdida de $ 70 millones, y en aumento, según el presidente de la organización, Miguel Ángel Loor.

La situación contrasta con lo que movió el año pasado y se esperaba para este. Los derechos de televisión representan el rubro más alto en los presupuestos de los equipos; en 2019 se negociaron por $ 25 millones.

Incluso, a inicios de este año, Loor señaló que existía un excedente de $ 6 millones que la cadena GolTV iba a entregar a LigaPro y se iba a repartir entre los clubes entre junio y julio.

Aquello quedó en suspenso, pues en la actualidad la cadena adeuda hasta dos meses a los clubes, según confirmaron directivos de El Nacional y Liga de Quito.

El efecto de la pandemia se reflejó también en los salarios y los clubes llegaron a acuerdos con sus plantillas para reducir los sueldos.

Por ejemplo, Orense acordó pagar el 50% de lo adeudado en los meses que no se juegue el torneo. Otros alcanzaron cifras más bajas, de entre el 25% y el 30%. (I)