Luego de cinco años de estar en el ojo de la tormenta por las acusaciones de la Fiscalía de Nueva York (Estados Unidos) en el famoso FIFAgate, el expresidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) Luis Chiriboga volvió a ser nombrado en nuevas investigaciones en torno al caso.

El Diario estadounidense The New York Times desveló la forma en la que el hijo del exdirigente, José Luis Chiriboga, supuestamente recibió sobornos a nombre de su progenitor en 12 pagos.

La trama fue descubierta por la Fiscalía del Distrito Este de New York que anunció un acuerdo por el que el banco israelí “Hapoalim” deberá pagar alrededor de $30 millones por el uso de cuentas de sus sucursales en Estados Unidos, Suiza y Uruguay.

Para pagar sobornos de la empresa Full Play, de los argentinos Hugo y Mariano Jinkis, a varios exdirigentes de la Conmebol con el propósito de obtener beneficios en la compra de derechos de televisión para distintos torneos internacionales avalados por el organismo rector del balompié sudamericano.

La Fiscalía de Brooklyn envió un comunicado en el que aparecen tanto las sucursales del banco como muchos de los montos transferidos por las cuentas de los Jinkis a los distintos dirigentes del fútbol sudamericano de ese momento y hasta el nombre de sus empresas fantasma, desde las que cobraban sumas por miles de dólares.

En el escrito presentado por la Fiscalía estadounidense, el banco admite que desde el 10 de diciembre de 2010 hasta inicios de 2015, uno de sus gerentes conspiró con ejecutivos de marketing deportivo y dirigentes de fútbol por pagos de soborno por cerca de $20 millones mediante fraude electrónico.

En cuanto al exmáximo directivo del fútbol tricolor, en el documento consta que entre 2009 y 2014, Luis Chiriboga recibió a través de su hijo al menos 12 pagos de sobornos por 2’125.000 dólares a nombre de sus cuentas asociadas con Hugo y Mariano Jinkis.

El 25 de noviembre de 2015, Luis Chiriboga fue acusado de conspiración de crimen organizado, múltiples cargos de conspiración por fraude electrónico y conspiración de lavado de dinero. Tras cumplir un poco más de la mitad de la pena salió en libertad el 12 de septiembre de 2019 de la cárcel de Ambato, donde cumplía la sentencia de seis años por el delito de lavado de activos.

Además de Chiriboga, entre los clientes del mencionado banco constan Eugenio Figueredo, expresidente de Conmebol, Luis Bedoya, expresidente de la Federación Colombiana, Sergio Jadue, de la Federación de Chile y Rafael Esquivel, de Venezuela.

Así como los principales personeros de la empresa Full Play, los Jinkis (padre e hijo), quienes fueron acusados por primera vez en 2015. El FIFAgate es el escándalo de corrupción más importante en la historia de la FIFA, el mismo fue destrabado en mayo de 2015.

Congreso de FEF suspendido

Los dirigentes del fútbol ecuatoriano fueron convocados este viernes 1 de mayo para realizar un congreso extraordinario, que tocaría el tema de la remoción de la presidencia de Francisco Egas.

El mismo estaba citado para las 15:00 de este viernes 1 de mayo de 2020. Debido a la emergencia que vive el país, los directivos se iban a reunir vía Zoom, la misma sería transmitida en vivo por YouTube. Estuvo al aire unos minutos y luego se dejó de difundir. Pero a partir de las 16:00 se transmitió un encuentro de representantes de los clubes desde el usuario XxNN XnXNN.

A través de una carta Egas se excusó de asistir al congreso, al que calificó de “ilegalmente convocado”. En la misma expuso que FIFA y Conmebol expresaron claramente que no validarán las decisiones de este congreso extraordinario.

Además, impuso una acción de protección a través de la función judicial que dispone la suspensión inmediata y provisional de los efectos de la resolución del 24 de abril pasado, fecha en la que seis de los nueve miembros decidieron remover a Egas del cargo y nombrar en su lugar a Jaime Estrada, así como la anulación de la convocatoria al congreso.

En el comunicado, un día antes de que se realice esta reunión extraordinaria, la entidad rectora del fútbol sudamericano expresó a la FEF que “pretender remover al presidente del organismo local por una vía distinta a la que prevén los estatutos de dicha entidad va en contravía del buen gobierno, con independencia del apelativo que se quiera usar para justificar ese cambio”, finaliza el documento firmado por José Montealegre, presidente de la comisión de gobernanza y transparencia de la Conmebol.

El fútbol ecuatoriano se mantiene en un compás de espera de lo que suceda con su federación y las decisiones que se tomen en torno al directorio. (I)