Las empresas que apoyen económicamente a los deportistas ecuatorianos tendrán beneficios tributarios. Esto lo contempla la Ley de Simplificación y Progresividad Tributaria, aprobada el 31 de diciembre de 2019 por la Asamblea Nacional.   

La iniciativa fue impulsada por el asambleísta por Pichincha  Sebastián Palacios, del Movimiento SUMA, pero aún no entra en vigencia por falta de reglamento. Así lo dio a conocer ayer el legislador, quien estuvo acompañado por deportistas, empresarios y promotores de eventos deportivos.           

Si bien son 347 deportistas que pertenecen al Plan de Alto Rendimiento -que impulsa el Estado a través de la Secretaría del Deporte para que se dediquen al 100% a sus actividades físicas-, a muchos no les alcanza lo que reciben.

El Estado invertirá este año $12 millones en dicho plan.  

Ante esta situación, Palacios impulsa esta iniciativa hace ocho meses con el fin de promulgar una ley que los beneficie. Con este estímulo, las empresas podrán deducir el 100% adicional del gasto para el cálculo de la base imponible del impuesto a la renta anual.

Palacios explicó que si los empresarios invierten $10.000 en un marchista, por ejemplo, o en un evento como el Ironman 70.3 de Manta, al final del año la compañía deducirá no solo esa cantidad sino el doble. “Esto se conoce como la doble deducibilidad”, afirmó el funcionario Palacios.    

Aunque la Ley ya fue aprobada por el Legislativo, solo resta que el Servicio de Rentas Internas (SRI) y la Secretaría del Deporte emitan el reglamento para que sea aplicada.  

La triatleta cuencana Elizabeth Bravo ha tenido acercamientos con empresas privadas, pero al momento de negociar un patrocinio le han dicho que están esperando que puedan aplicar los beneficios de la ley.

“Mi respetuosa demanda al SRI y a la entidad que rige el deporte en el país es que el reglamento salga lo más pronto posible”, mencionó.

La iniciativa de Palacios también tiene el respaldo de la Cámara de Industrias y Producción, a través de su presidente Pablo Zambrano, quien consideró que la doble deducibilidad tiene que llevar al país a una cultura de creer en “nosotros mismos y en los deportistas”.

El montañista con discapacidad Sebastián Carrasco, quien coronó el Kilimanjaro en una bici impulsada por las manos, explicó que de no ser por la empresa privada no habría podido conseguir esta hazaña. (I)