Hoy o máximo el lunes de la próxima semana, el directorio de El Nacional resolverá si les brinda o no una nueva oportunidad a los cuatro jugadores que incurrieron en actos de indisciplina y perjudicaron al club. Para dos de ellos, la plana mayor de la institución pidió el procedimiento de visto bueno ante el Ministerio de Trabajo.  

Christian Márquez, Jorge Valencia, Édder Fuertes y Alejandro Villalva, elementos implicados en este caso, se reunieron el pasado martes con el asesor jurídico de la entidad, Washington Andrade, y le solicitaron se revea la resolución del directorio. Y aunque no dio el nombre, Andrade manifestó que un miembro del directorio también pidió la reconsideración.

Ambas peticiones se hicieron en forma verbal, en el caso del directivo es necesario que la formalice por escrito. La reconsideración consta en el estatuto de la institución y con ella se les respeta el derecho de defensa de los exponentes.

Los elementos para quienes se pidió el visto bueno son Christian Márquez y Jorge Valencia, quienes habrían reincidido en la falta disciplinaria.

Jorge Yunda, presidente del representativo, precisó que la víspera del partido con Deportivo Cuenca, que se desarrolló el domingo último, los cuatro deportistas se presentaron a laborar con hedor a licor, circunstancia ajena a la ética de un futbolista profesional.

De quedar separados del equipo los dos jugadores, Yunda anunció que para la segunda etapa del certamen se buscarán reemplazos del mismo nivel o incluso mejor.

Por esta situación, los atletas no fueron convocados por el director técnico, Octavio Zambrano, al cotejo frente al ‘Expreso Austral’, en el estadio Atahualpa de Quito, que terminó empatado 1-1. A través de su cuenta de Twitter, Márquez admitió su error y pidió disculpas a la directiva y a los aficionados del  equipo ‘rojo’.

Andrade añadió que, si bien Márquez y Valencia son nombrados como reincidentes, no existe una constancia tangible sobre este antecedente. A criterio personal, el jurista considera que, si todos cometieron la misma falta, todos deberían correr la misma suerte.

En todo caso, de mantenerse en el ente ‘criollo’, los futbolistas podrían ser multados, suspendidos o recibir otro tipo de castigo. El visto bueno -detalló- es un proceso judicial en el que, tras revisar las pruebas, un juez determina si el patrono tiene o no la razón. Si el veredicto es favorable a los jugadores, deberán ser reincorporados. (D)