El diario del ‘Flaco’
Djokovic recupera su mejor nivel
Qué gran final de Wimbledon nos brindaron Novak Djokovic y Roger Federer hace una semana. Fue una de las mejores de todos los tiempos. Tuvo un tenis de gran calidad, mucha tensión, drama y un resultado incierto hasta el final.
Federer apuntaba a ganar su octavo título en su superficie favorita, había tenido una buena preparación, ganando el torneo de Halle en Alemania y en Londres tuvo un cuadro bastante benévolo en las primeras rondas, lo que le permitió llegar fresco física y mentalmente a la final. Roger sabía que esta podía ser una de sus últimas oportunidades para ganar un trofeo de Grand Slam, y estaba dispuesto a hacer todo lo posible por aprovecharla.
Roger no tuvo mayores inconvenientes para derrotar al italiano Paolo Lorenzi en la primera ronda, a Gilles Muller en la segunda, al colombiano Santiago Giraldo en la tercera y al español Tommy Robredo en los octavos de final, sin ceder un solo set.
En cuartos de final la situación fue muy diferente, su rival Stanislas Wawrinka llegó a esta instancia jugando un gran tenis, y complicó mucho a Roger desde el inicio, le ganó el primer set y estuvo muy cerca de ganar el segundo, pero tras ganarlo en un tie-break, la dinámica del encuentro cambió y Federer se llevó los últimos dos sets 6-4, 6-4 rompiendo el servicio de Wawrinka una vez en cada set.
En semifinales, su rival fue el canadiense Milos Raonic, un jugador muy peligroso por la potencia de su servicio y de su golpe de derecha que había eliminado en octavos al japonés Nishikori, y en cuartos de final al joven australiano Nick Kyrgios, de 19 años, el verdugo de ‘Rafa’ Nadal en octavos de final.
Federer jugó un partido impecable contra el ‘Bombardero’ canadiense, no le dio una sola oportunidad de quiebre, cometió apenas 11 errores no forzados y quebró el servicio de Raonic en tres ocasiones, una en cada set, para cerrar el partido por 6-4, 6-4 y 6-4 y meterse en su novena final londinense.
‘Nole’ comienza su camino con una fácil victoria frente a Andrey Golubev, pero en la segunda ronda el veterano checo Radek Stepanek estuvo a punto de llevarlo al quinto set, en un partido de más de tres horas de duración, en tercera ronda vence a Gilles Simon en sets corridos, y en octavos resuelve con tranquilidad frente a Jo-Wilfried Tsonga.
En cuartos de final, el croata Marin Cilic llega a tomar una ventaja de dos sets a uno, pero Djokovic demuestra su superioridad física y gana el cuarto y quinto sets cediendo un total de cuatro games. Su adversario en la semifinal, el búlgaro Grigor Dimitrov -a criterio de muchos, la estrella de la nueva generación de tenistas, pero a quien le había pesado mucho la atención y la expectativa que genera- parece finalmente estar alcanzando su madurez deportiva y lo confirmó venciendo en cuartos de final nada menos que a Andy Murray, el campeón defensor.
Djokovic salió airoso de la dura batalla contra Dimitrov, ganando el tercero y cuarto sets en tie-breaks, para llegar a la final contra el gran Roger.
En la final, Roger gana el primer set 9-7 en el tie-break, Djokovic reacciona, gana el segundo set 6-4. El partido es muy parejo, Djokovic lleva ventaja en los puntos largos, especialmente en los duelos de revés contra revés, pero Federer se mantiene en el partido gracias a la eficacia de su primer servicio, llegan nuevamente igualados a 6, pero ‘Nole’ gana el tie-break y se va adelante dos sets a uno.
En el cuarto, Djokovic logra romper el servicio de Federer y toma una ventaja de 5-2 que parece definitiva, sin embargo, Federer recupera el quiebre y saca para igualar a 5, Djokovic alcanza una ventaja de 30-40 y tiene su primer punto de partido, Federer saca cerca de la línea, la pelota es marcada afuera por el juez de línea, pero apela la decisión recurriendo a la tecnología de ‘ojo de halcón’ que demuestra que el saque había sido sobre la línea, era un as para Federer, ese punto cambió el partido. Federer mantuvo su servicio y ganó los dos games siguientes igualando a dos sets.
Al comenzar el quinto set, Federer parecía más entero físicamente que Djokovic, que incluso pidió atención del fisioterapeuta en un cambio de lado por una molestia en la pantorrilla.
Ambos tuvieron oportunidades de romper el servicio del otro, pero se mantuvieron firmes, hasta que en el décimo game, Djokovic pudo quebrar el saque de Roger y ganar su segundo título tras 3 horas y 57 minutos de tenis del más alto nivel.
Una lástima que en un partido así uno de los dos tenga que perder, seguramente una derrota muy dura para Federer, que a su edad tendrá cada vez menos oportunidades de ganar grandes torneos.