Las ilusiones de la hinchada del Deportivo Cuenca por ser protagonista en el campeonato nacional de fútbol comenzaron esta semana con la presentación de la indumentaria y el viernes con la denominada Noche Colorada.

“Pedimos a Dios, la protección para nuestros jugadores, el respeto para nuestro deporte y a nuestros adversarios”, dijo Claudio Peñaherrera, presidente del club Deportivo Cuenca, la noche del viernes, en la presentación de la plantilla e indumentaria para la temporada 2018.

En la noche del jueves se aprovechó para homenajear a sus viejas estrellas, entre ellas al mundialista uruguayo  Rubén Bareño, delantero que jugó en 1972 junto al goleador Ángel Liciardi, Carlos Rodríguez y Vicente Martínez, este último ya fallecido. También fueron homenajeados el argentino José María Gatti, Jimmy Blandón y Marcelo Bohórquez, los dos últimos nacionales y que fueron parte del equipo en 2000.

“Me trataron tan bien que si no me contrataba Racing de Argentina, me quedaba a jugar un año más en Cuenca y seguro me quedaba a vivir acá”, dijo Bareño, que jugó con su Uruguay en el mundial de México 70.

Mientras tanto en la noche del viernes, en su primer partido de prueba ganó a Guayaquil City 2-1 y dejó satisfecha a su hinchada. Los casi 10.000 aficionados que llegaron al escenario disfrutaron de la colorida noche.

El Cuenca está a la espera de que la Federación Ecuatoriana de Fútbol defina la fecha de inicio del certamen. Y ha pedido a Liga de Quito, su primer rival, jugar el 7 de febrero ya que al siguiente día se trasladará a Paraguay para enfrentar a Sportivo Luqueño por la Sudamericana. (I)