La Asociación Ecuatoriana de Árbitros (AEA) espera una sanción ejemplar para Galo Cárdenas, presidente de Deportivo Cuenca, tras la pelea que tuvo el réferi Roddy Zambrano con el citado directivo, luego del empate 2-2 entre Delfín y el conjunto ‘morlaco’, el pasado miércoles. El incidente ocurrió en el estadio Reales Tamarindos de Portoviejo, escenario de la contienda.

De acuerdo al informe arbitral del cotejo, válido por la novena fecha de la segunda etapa del campeonato ecuatoriano 2016, Cárdenas se acercó a la puerta del camerino de los árbitros, insultó a Zambrano e intentó agredirlo. Habría tratado al juez de “ladrón, corrupto e hijo de puta”.    

“La comisión disciplinaria de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) debe manifestarse ensobre la base del informe de los árbitros. No es justo que los árbitros ya ni siquiera tengamos tranquilidad dentro del camerino. Ya no solo los quieren agredir los hinchas, sino los propios dirigentes”, manifestó Luis Muentes, presidente de la AEA.

Solo a través de un castigo riguroso, agregó, se cortará de raíz la violencia contra los miembros de su gremio. Advierte que, de no darse una sanción pertinente, ellos buscarán la manera de hacer sentir su descontento.    

Zambrano se excusó de hablar sobre el tema porque el reglamento se lo impide, pero mencionó que la comisión de seguridad de la FEF es la responsable de definir si se necesita reforzar la protección o vigilancia de los camerinos.

Cárdenas, en tanto, reconoció que insultó al réferi calificándole de ‘mamarracho’ porque no validó un tanto de Juan Pablo Segovia que le hubiese dado la ventaja al Cuenca; sintió que se les estaba robando. Zambrano lo habría escupido.

El intercambio de golpes se produjo en un segundo momento, cuando Cárdenas y otra persona pasaban por el camerino de árbitros; en ese instante los jueces salieron del camerino y, según el titular ‘morlaco’, se lanzaron contra ellos. Añadió que fueron atacados por 7 sujetos. El dirigente aclaró que aceptará la pena que le impongan, siempre y cuando también sancionen al juez central del partido. Por ahora alista su defensa. Después de conocerse el dictamen de la comisión de disciplina, presentará testigos y declaraciones juramentadas.

Álex de la Torre, presidente de la comisión disciplinaria de la FEF, explicó que, por disposición de la Federación Internacional de Asociaciones de Fútbol (FIFA), el informe arbitral goza de presunción de veracidad; motivo por el cual, para desvirtuar su contenido, el acusado debe exhibir pruebas contundentes.

No obstante, De la Torre conocía acerca de una denuncia en contra de Cárdenas por parte de la comisión de arbitraje de la FEF. Si esta se presentaba, la comisión disciplinaria no lo podía sancionar con base en el informe arbitral; más bien procedería a abrirle un expediente de investigación y juzgamiento, cuyos resultados determinarían si debe existir o no un castigo.  

Dependiendo de la gravedad, las infracciones provenientes de directivos pueden castigarse con multas de hasta $ 5.000, suspensiones de hasta 3 años o la expulsión definitiva. (I)