Miller recibió el balón de Fidel y... ¡Goool! Ecuador se ponía en ventaja 2-0. El segundo tanto, el que selló la victoria de la ‘Tri’  sobre Honduras, ayer, en el estadio Olímpico Atahualpa de Quito, se generó en una complicidad que comenzó en 2007 cuando ambos, Bolaños y Martínez, formaron parte de la Selección Ecuatoriana Sub-17.

Corría el minuto 34, la pelota pasó por varios de los talentosos ecuatorianos. Walter Ayoví se la cedió a Michael Arroyo, este cambió para Miller Bolaños, Bolaños se la dio a Martínez y este último, como en los viejos tiempos, se la devolvió a Miller, quien desprendió un disparo que sonó a mortero, hasta estrellarse en la malla del arquero Noel Balladares.

Fue lo mejor del partido y una muestra de lo que pretende el estratega Gustavo Quinteros, quien se estrenaba de local dirigiendo en el estadio donde la ‘Tricolor’ es dueña de casa y ha labrado su clasificación a 3 de los 4 últimos mundiales (va por el cuarto).

El cotejo de ayer, especialmente el primer tiempo, evidenció un estilo diferente, un juego con más toque, más vistoso, ideal para hombres como Miller y Fidel, quienes con sus gambetas le dan alegría al fútbol.

Claro, hay que ponerse a pensar. Ambos gozan de atributos individuales que requieren apoyos. Siempre brillan y hacen brillar. Los hinchas de Emelec echan de menos las ‘tertulias’ peloteras entre Miller y Ángel Mena, llenas de picardía y sorpresa, esas que desean replicar en la Selección Nacional. Lástima por Mena que no pudo participar de esta convocatoria por encontrarse lesionado.

Los hinchas de Deportivo Quito abrazan con cariño el recuerdo de la dupla Fidel Martínez-Matías Alustiza que les hizo cantar goles en 2012, tanto en el campeonato ecuatoriano como en la Copa Libertadores de América.

Y es que Miller y Fidel son elementos de entendimiento colectivo, de personalidad ‘simbionte’, que siempre buscan con quién juntarse para interactuar con la pelota. Esas características las aplicaron en la ‘Minitri’ sub-17, cuando, dirigidos por Homero Mistral Valencia, participaron en el Campeonato Sudamericano de la categoría ‘Ecuador 2007’.

Ayer volvieron a encontrarse y, en seguida, demostraron su capacidad para juntarse. En el primer tanto, a los 12 minutos, un centro de Bolaños que iba hacia Martínez fue desviado por el defensa José David Velásquez. El autogol solo evitó que la mancuerna se enlazara, aunque el resultado fue igual.

La avalancha de intenciones de vulnerar el pórtico ‘catracho’ continuaba. A los 23 minutos aparecieron de nuevo, en esta ocasión alternándose. Balladares atajó un remate de Bolaños y en rebote Martínez envió la esférica por un costado.

Honduras bajo presión no atinaba a defenderse. Si no eran Fidel y Miller, Antonio Valencia, Christian Noboa o Michael Arroyo apuntaban al arco. La real capacidad de fútbol colectivo se produjo a los 34, con la pincelada que Bolaños desprendió para definir el lance.

En la segunda mitad, en razón de las sustituciones de un elemento por otro y de los cambios posicionales que experimentó Quinteros, la intensidad ofensiva del ‘conjunto abanderado’ bajó notablemente y con ella las opciones de que el binomio fusionara sus ideas.

Es más, ambos serían reemplazados. El ingreso del ariete Daniel Angulo por Fidel Martínez a los 72 minutos obligó a retroceder a Bolaños y a los 81 minutos la exclusión de Bolaños para dar paso al lateral por izquierda Óscar Bagüí, cerró el capítulo de esta sociedad.

Las conclusiones le corresponden a Quinteros, pero esta pareja se une a otras que cuando se conectan abren caminos y aumentan las oportunidades de derrotar las vallas adversarias. Miller también se entiende con Énner Valencia, por ejemplo, o Énner puede unirse con Felipe Caicedo. Sin descartar todo lo que podrían generar Miller y Ángel Mena.

El encuentro contra Honduras le permitió a Bolaños convertir su quinta anotación con la camiseta de la ‘Tricolor’ absoluta y le encamina a consolidarse como una de las principales armas de Quinteros. La progresión de este exponente, sin chance en la era del timonel colombiano Reinaldo Rueda, ha sido rápida y debería dar mucho de qué hablar en las eliminatorias.

Ecuador cierra de esta manera parte de su preparación previa al premundial, cuyo camino comenzará el próximo 8 de octubre en el estadio Monumental de Buenos Aires frente a Argentina y continuará el 13 de ese mes en Quito, frente a Bolivia. El duelo contra el plantel centroamericano es el único comprobatorio que consiguió la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF).

En el encuentro de ayer, el instructor argentino-boliviano efectuó 6 variantes: en la zaga relevó a Arturo Mina y colocó a Frickson Erazo; en el mediocampo probó a Carlos Gruezo, sacando a Segundo Castillo. Puso a Renato Ibarra en lugar de Juan Carlos Paredes, lo que dejó en la banda derecha a Antonio Valencia. Mandó a la cancha a Daniel Angulo por Martínez, a Bagüí por Bolaños y a Juan Cazares por Michael Arroyo. Con Quinteros hay más banca, mejor devolución y una visión más ofensiva de juego. (I)

Quinteros, satisfecho con los regresos a la ‘Tri’

La selección visitó la cancha del estadio Olímpico Atahualpa después de no hacerlo desde octubre de 2013, cuando selló su clasificación contra Uruguay (1-0) al Mundial de Brasil 2014.

En el regreso al escenario capitalino también volvieron a lucir la camiseta de la Tricolor Antonio Valencia, SegundoCastillo y Michael Arroyo. Los 3 futbolistas llevaban más de un año sin actuar con el equipo que dirige hoy Gustavo Quinteros, quien se mostró satisfecho por el rendimiento de ellos en el amistoso contra Honduras.

“Es difícil superar la actuación de Antonio Valencia de mitad de cancha para adelante. Generó muchas situaciones e individualmente estuvo siempre ordenado en la marca”, explicó el entrenador.

Destacó que ‘Toño’ podría actuar en 3 posiciones con él como DT: como volante por derecha (su posición habitual), lateral por esa banda y volante de marca. “El sábado lo probé como doble 5 y puede aportar mayor movilidad en la salida. Tiene buen pie y entrega muy bien la pelota”, agregó.

El jugador del Manchester United estuvo citado para la Copa América de Chile, pero se cayó de la lista pues decidió retirarse la placa y los tornillos que tenía en su tobillo derecho, producto de una lesión sufrida en 2010.

Mientras que Castillo estuvo alejado del equipo nacional desde junio del año pasado, previo al inicio del Mundial de Brasil. Una lesión de ligamentos le impidió ser parte de la delegación y ayer volvió a actuar junto a Christian Noboa en la labor de recuperación.

“Segundo  volvió a actuar en Primera División con su club (Dorados de Sinaloa). Lo hizo muy bien y además necesitamos jugadores de sus características para afrontar un partido de visita (contra Argentina)”, dijo el argentino sobre el desempeño del ‘Mortero’.

Arroyo, jugador del América, también se perdió el torneo en Chile por una lesión muscular y ayer volvió como titular por la banda izquierda. Quinteros señaló que le costó generar peligro y asociarse mejor con sus compañeros, pero que tácticamente cumplió con lo que le solicitó.

“Es el primer partido que juega. No es de ponerse la camiseta y dar enseguida lo que el equipo necesita de él. Con el correr de los partidos estoy seguro de que va a mejorar, porque hoy (ayer) cumplió por momentos y puede dar más”, argumentó el estratega.

Quinteros también destacó el trabajo de presión que hizo la selección nacional para provocar el error en la salida de los hondureños. Esa labor estuvo a cargo de los delanteros Fidel Martínez y Miller Bolaños, y de los volantes por fuera, Valencia y Arroyo. (I)