Barcelona puso el fútbol ante Santos, que se encerró
Barcelona venció 1-0 a Santos y se clasificó a las semifinales de la Copa Conmebol Libertadores luego de 19 años. El único gol del encuentro fue obra del uruguayo Jonathan Álvez.
Este es el tercer equipo brasileño al que el ‘Ídolo’ derrota en la actual edición de la Libertadores; antes le ganó a Botafogo, en Río de Janeiro, y a Palmeiras, en Guayaquil.
Además de vencer y eliminar al exequipo de Pelé -que ayer tuvo el respaldo de 20 mil hinchas- el club ecuatoriano le quitó el invicto en esta edición de la Copa.
En la siguiente ronda los ‘toreros’ se medirán nuevamente a un equipo brasileño, a Gremio, que la noche de ayer dejó en el camino al Fogao.
Además del logro deportivo, el ‘Ídolo’ ganará $ 1’250.000 como premio por haber clasificado a la siguiente ronda del máximo torneo continental de clubes; este valor le entrega la Conmebol.
El ‘Ídolo’ dominó el primer tiempo
Tres minutos duró el buen juego de Santos hasta que los zagueros y volantes ‘toreros’ lograron neutralizar su sistema. Tal como sucedió la semana pasada en Guayaquil, los dirigidos por Guillermo Almada lograron inclinar la cancha a su favor y controlar el balón.
A los 14’ llegó la primera jugada de peligro del partido. Tras un remate de fuera del área de Matías Oyola, su tiro fue despejado por el portero Vanderlei al tiro de esquina.
Cuatro minutos después, el Peixe pudo abrir el marcador, luego de un cabezazo de David Braz que se estrelló en el horizontal, ante la mirada atónita del guardameta Máximo Banguera, que no reaccionó.
Marcos Caicedo, que a los 16’ recibió tarjeta amarilla, generó un tiro libre a favor de Barcelona a un costado del área de Santos. Al cobro fue Damián Díaz, que le cedió el balón a Oyola, pero su remate fue bloqueado por la defensa.
Díaz se convirtió en el conductor de los ‘toreros’ y manejó los tiempos del partido, ante la débil marca de los volantes brasileños.
Por momentos el partido se cortó en media cancha por faltas que cometieron ambos equipos, pero el árbitro peruano, Víctor Carrillo, logró controlar las acciones.
Tras el tiro libre, Barcelona volvió a tomar las riendas del partido e inclinó otra vez la cancha a su favor, pero en esta primera fase no hubo los espacios para entrar al área y abrir el marcador.
Álvez vuelve a marcar
Para la segunda mitad, Barcelona salió con la misma intención y en los primeros minutos logró meter en su cancha a Santos. El partido no era hasta ese momento como Almada lo había pronosticado, ya que su rival no le dejaba espacios.
Levir Culpi, DT del Peixe, parecía que se conformaba con el resultado. El 0-0 le daba la clasificación.
Almada dispuso el ingreso de José Ayoví y Érick Castillo, en lugar de Ely Esterilla y Marcos Caicedo, visiblemente cansados.
A los 68’ Álvez silenció a los 20 mil hinchas locales tras marcar el único tanto del encuentro. El ‘Loco’ recibió dentro del área un centro de Érick Castillo, y con un remate de cabeza venció a Vanderlei.
Tras el gol, los locales cambiaron su estrategia y salieron de su campo. El encuentro en los minutos finales se volvió brusco y otra vez Carrillo expulsó a un jugador de Barcelona. Gabriel Marques vio la tarjeta amarilla tras participar de una gresca; también fue sacado del partido Bruno Henrique.
Sobre el final, Barcelona logró enfriar el partido y mantener el 1-0 a su favor. Tras el pitazo final del peruano Carrillo los jugadores del Peixe reclamaron, mientras los del ‘Ídolo’ festejaban con un puñado de hinchas amarillos. (I)
Gremio avanza a semifinales de Libertadores al vencer 1-0 al Botafogo
Gremio avanzó a semifinales de la Copa Libertadores 2017 al vencer 1-0 al Botafogo en el partido de vuelta de cuartos de final disputado en Porto Alegre.
Con un gol del paraguayo Lucas Barrios a los 62 minutos, Gremio inclinó la balanza a su favor. Barrios se escabulló de la defensa del Fogao para cabecear un tiro libre que llegó al área en forma de centro.
Ver la red balanceándose encendió a la hinchada local en el Arena do Gremio, que ya sufría con la idea de tener que definir el pase en los penales si ambos equipos no lograban romper la igualdad 0-0, el mismo resultado del partido de ida.
Es que los gaúchos, que pisaron el césped del Arena do Gremio obligados a ganar para pasar de fase, demoraron en reaccionar y sufrieron la presión del rival, que en varias ocasiones estuvo a punto de anotar un valioso gol de visitante.
Un pelotazo del local Fernandinho a los 20 minutos que dio en el palo hizo vibrar al estadio, pero a partir de allí Botafogo dominó la escena ganando las pelotas divididas y aprovechando los errores de la defensa local con veloces contraataques.
Fue en el segundo tiempo que el Gremio redobló la atención y cerró los espacios para el Botafogo, que tuvo más dificultades para llegar al área rival.
Y pese a sentir la falta de su mediocampista ofensivo Luan, Gremio despertó para cumplir con su misión.
Después de una serie de jugadas peligrosas que obligaron al arquero paraguayo Roberto ‘Gatito’ Fernández a realizar varias atajadas salvadoras, el gol de Barrios hizo al Gremio reverdecer y a partir de allí consiguió bloquear la presión del Botafogo, que buscó el empate redentor hasta el último minuto, sin éxito. (I)