El Burdeos, que se juega una parte de su futuro europeo este jueves en Gante en la ida de la repesca de la Europa League, coquetea desde hace cinco días con Thierry Henry para que se haga cargo del equipo tras la polémica con Gustavo Poyet.

Las opciones de que el exfutbolista francés aterrice en el banquillo del Girondins cotizan al alza en las últimas horas.

Pero ningún dirigente confirma esta información debido al proceso abierto el viernes contra Poyet, todavía en el cargo, después de "sus declaraciones que sobrepasaron los límites" contra la directiva tras el partido ante el Mariupol. Un procedimiento que terminará dentro de dos días.

Mientras tanto, todo se podría acelerar para 'Titi' en su búsqueda a los 41 años de una primera experiencia como entrenador principal, después de haber dado sus primeros pasos en Bélgica como ayudante a cargo de los atacantes de los Diablos Rojos y a quien la Federación belga intenta convencer para que pase a ser el primer ayudante del seleccionador Roberto Martínez.

Últimamente, el entorno del ídolo de Highbury se ha informado sobre las costubres girondinas, el contexto de Burdeos, pero también sobre los argumentos deportivos y económicos que deben aportar los futuros compradores estadounidenses de GACP.

El nombre de Henry salió a la palestra desde la suspensión de Poyet el viernes por la mañana, y su perfil gusta más que el de otros técnicos con más experiecia a los que también se ha relacionado con el Burdeos como Laurent Blanc, Jurgen Klinsmann o Claudio Ranieri. También se barajó la opción de Arsène Wenger, pero con el rol de director deportivo.

Sea quien sea, el futuro entrenador girondino se encontrará una situación complicada. En la Ligue1, los hombres de Benoît Costil ocupan la 18ª posición y la preocupación entre los aficionados es cada vez mayor ante el futuro cambio en la propiedad del club.

Para el partido de ida de la repesca de la Europa League, el Burdeos soñaba contar con un nuevo delantero luego de la polémica salida de Gaëtan Laborde al Montpellier. 

El atacante deseado es el brasileño Pedro, actual máximo goleador del campeonato de su país con el Fluminense. El Burdeos ha presentado dos ofertas por el nuevo internacional con la Canarinha, la última de ellas entre los 15 y los 17 millones de euros según los medios, pero el club carioca las ha rechazado. (D)