Barcelona derrotó este domingo 2-0 al Sevilla en la final de la Copa del Rey (2016). Para el equipo catalán este es el título número 28 en este certamen nacional.

En los 90’ reglamentarios (0-0) el encuentro fue intenso y ambos equipos tuvieron oportunidades claras de marcar.

El primer tanto llegó a los 6’ del tiempo extra a través de Jordi Alba, tras un pase de Lionel Messi. De ahí el Sevilla se desdibujó tácticamente en la cancha, adelantó sus líneas en búsqueda del gol del empate, pero dejó muchos espacios que fueron aprovechados por su rival para hacer daño. Cuando se jugaba el último minuto extra llegó el tanto del brasileño Neymar, para sellar la final.

El partido -que se desarrolló en el estadio Vicente Calderón- se jugó con pierna fuerte durante los 120’. Producto de aquello, el juez central tuvo que sacar 11 tarjetas amarillas y expulsar a los argentinos Javier Mascherano y Éver Banega, y al portugués Daniel Carrico, por cortar con fuertes faltas opciones claras de gol.

Para el DT del Barcelona este es el primer doblete (liga y copa) que consigue como entrenador.    

Pero no todo fue felicidad para el equipo catalán, ya que su goleador, el uruguayo Luis Suárez, abandonó el campo de juego a los 57’ por molestias musculares. Hasta el cierre de esta edición no se confirmaba la gravedad de la lesión. (D)