Parece que los años no han pasado para la cubano-venezolana María Conchita Alonso (57 años), la ecuatoriana Patricia González (71) y la argentina Silvana Di Lorenzo (60) por la energía que derrochan en el escenario.

Prueba de ello fue lo que ocurrió, la noche del jueves pasado, en el Centro de Convenciones de Guayaquil cuando estas cantantes llevaron al delirio a sus seguidores a través de sus éxitos, y unieron a generaciones.

La primera en hacerlo fue una anecdótica Patricia González, quien -entre canciones- interactuó con el público y contaba momentos de su vida privada, como el enamorado que tuvo en su adolescencia, siendo una chica “muy fea y flaquísima”.

A ese galán, cuyo nombre no reveló, le dedicó el tema ‘Cuidado’, el que en los 80 popularizó el mexicano José José, como respuesta a su proceder, puesto que -según contó- él la negaba “como Pedro a Cristo”.

“Ahora me lo topo por la calle, pero mejor de lejitos”, dijo entre risas la intérprete. Temas como ‘Te propongo’, ‘La página 10’ ‘Tú te lo pierdes’, ‘Y’, ‘Ojalá que te mueras’ y ‘Devuélveme el corazón’ también incluyó en su repertorio antes de saludar a sus “ñañas” que se encontraban entre el público que casi llenó el recinto.

González agradeció a los presentes por los aplausos y aclaró que no es la telonera del concierto. “Aquí todas tres somos mujeres valiosas que merecemos el mismo respeto y tenemos el mismo espacio de tiempo para cantar”, replicó.

De inmediato interpretó ‘Amor pirata’ y después ‘A que no te atreves’, tema que popularizaron Los Antares y que se lo dedicó al colombiano Carlos Vives, uno de sus amigos más cercanos pese la distancia y los compromisos profesionales. “El es mi amigo y si a él le gusta, a mí también, más claro”.

Con este tema se despidió del escenario, pero el público le insistió que vuelva. Es que -como ella misma dice- no se podía ir sin cantar ‘La Torre’, tema que fue coreado de principio a fin por todos.

Minutos después le tocó el turno a una romántica Silvana Di Lorenzo, quien ataviada con un ajustado vestido celeste, que dibujaba su aún esbelta figura, cantó todos sus éxitos como ‘Me muero por estar contigo’, ‘El amor no es así’, ‘Grande, grande, grande’, ‘Locuras tengo de ti’, ‘Hay que salvar nuestro amor’, ‘Yo te necesito’ y ‘Un poco más’.

Todas estas interpretaciones las hizo con la misma sutileza y el ligero toque sensual que la caracterizó en la década del setenta.

“Sé que no todos se saben mis canciones, pero es la oportunidad de escucharlas y que se adueñen de ellas. Yo sé que se van a divertir tanto como lo estoy haciendo”, dijo antes de cantar ‘Volver a comenzar’, ‘Tantos deseos de ti’, ‘Lo mismo que a usted’, ‘No sé cómo decirte’, ‘Reír y llorar por amor’, ‘Palabras, palabras, palabras’ y finalmente, ‘Gloria’, original de Umberto Tozzi que después popularizó en inglés Laura Branigan (+) y que Di Lorenzo cantó en italiano y puso a bailar a todos los asistentes.

María Conchita, la más esperada

Tras pequeños ajustes en el escenario, María Conchita Alonso, quien no visitaba Ecuador desde hace 25 años, subió al escenario justo a la medianoche, ante los gritos de histeria de sus seguidoras. Su primer tema fue ‘Tómame o déjame’, aquel que en el 70 cantó Mocedades, pero que María Conchita grabó en el 80 y la llevó a recorrer toda América.

“Qué lindos. Gracias por hacerme sentir que los años no han pasado por aquí y que el cariño se mantiene intacto. La verdad es que he sido una tonta por alejarme mucho tiempo de Guayaquil”, fueron las primeras palabras de la también actriz, quien ha trabajado en una veintena de películas en Hollywood junto a actores como Robin Williams (+), Sean Penn y Al Pacino.

De inmediato continuó con éxitos como ‘Eres tan real’, ‘La loca’, ‘Lluvia de amor’ y ‘Entre la espada y la pared’, canciones que interpretó con la misma sensualidad que fue su carta de presentación en el ochenta.

En ese entonces no solo dio qué hablar por las letras de sus canciones y su modo de interpretarlas, sino que también fue la primera cantante en subirse en un escenario con vestidos stretch, de lentejuelas, medias de red y enormes zapatos de tacón. Ahora su apariencia es más conservadora. Usa trajes largos y con vuelos, aunque se mantienen los brillos y maneja una sutil sensualidad.

María Conchita invitó a Patricia González al escenario y juntas cantaron ‘Contigo aprendí’ y ‘Somos novios’, las que grabó en 1995 de la mano de Armando Manzanero.

Tras un leve cambio en su atuendo, cantó ‘Acaríciame’ con el que no solo sedujo a su público, sino también al saxofonista Roberto Bosch, acariciándolo y jugando con él, un ‘performance’ muy característico en sus presentaciones y que despertó gritos entre los fans.

María Conchita cantó además ‘Amor de madrugada’, ‘Decir te quiero’, ‘Es que llegaste tú’, ‘Te quiero, te quiero’, ‘Tú eres el hombre’, ‘O ella o yo’, ‘Tú y yo’, ‘Tú, mi hombre’, para cerrar con ‘Una noche de copas’, su tema más representativo que alborotó a más de una.