María inventó 138 combinaciones de jugos de frutas
Con una licuadora y un exprimidor de frutas manual, la latacungueña María Jácome, de 66 años, empezó a preparar jugos para sus vecinos de la calle La Michelena, en el sector El Pintado, al sur de Quito. Su situación económica era crítica; la separación de su esposo la afectó desde el punto de vista emocional, pero la impulsó a buscar por sí misma los recursos para solventar los gastos familiares, porque tiene 2 hijos, uno de ellos vive en Suecia y el otro en Estados Unidos.
Como en todo negocio, al comienzo había días buenos y malos. Aunque, en algún momento, pensó que la venta de jugos no le traería réditos económicos, con el tiempo se convenció de lo contrario: el número de clientes aumentó y el local que arrendó empezó a quedar pequeño para atender a las decenas de personas que acudían en busca de un juguito de frutas.
En un principio, buscó el modo de atenderlos aunque el espacio era reducido, pero tiempo después decidió arrendar otro local más grande en el mismo sector.
Al mismo tiempo, contrató a varios empleados para que le ayudaran en el negocio. Con los 2 locales, la latacungueña consiguió no solo mantener su clientela, sino aumentarla. Ahora tiene un local en el Quicentro Sur. Todos llevan el mismo nombre: El Palacio del Jugo.
Su negocio no solo ha crecido, sino que es considerado una hueca patrimonial por el Ministerio de Cultura y Patrimonio, porque apuesta no solo al reconocimiento de las frutas que se cultivan en el Ecuador, sino que también se convierte en un lugar que garantizar una alimentación sana y nutritiva. Al principio, María preparaba jugos de un solo sabor: toronja, mora, zanahoria, naranja y tomate de árbol.
Hoy, después de 13 años de trabajo, tiene más de 138 combinaciones que registra, una a una, en un libro personal de recetas. Entre estas combinaciones, una de las más demandadas es la llamada “levantamuertos” que contiene borojó, aguacate, huevo de codorniz y algarrobina, una sustancia que contiene algarroba, entre otros ingredientes. Para preparar nuevos jugos, Jácome ha recurrido a libros de recetas que le permiten conocer más sobre la combinación de las frutas y los sabores. “Siempre he buscado combinaciones, no me gusta quedarme con los jugos básicos”, comenta.
Jácome y su personal participaron la semana pasada en el Festival de Comida Ecuatoriana Mesabe, un encuentro que promociona la cocina patrimonial a escala nacional e internacional. Ahí sus jugos, una vez más, cautivaron el paladar de quienes acudieron a esta cita. “Yo compro las frutas en el Mercado Mayorista”, dice. Sus frutas favoritas son la sandía y el melón porque son diuréticas. “Mis jugos son sanos y también bien ricos”, comenta.