La  incidencia de las enfermedades cerebrovasculares en Ecuador es una realidad que afecta cada vez a más ecuatorianos, a tal punto que se ubicaron en 2020 como la tercera causa de muerte en Ecuador, según cifras del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC). 

Las cifras sustentan el avance de las enfermedades cerebrovasculares, pues durante 2020, 5.102 personas fallecieron a causa de un Accidente Cerebro Vascular (ACV) en el país, 11% más que en 2019 de acuerdo con datos del INEC.

Al igual que sucedió con otras patologías, la pandemia ocasionada por el Covid-19 ha restado visibilidad al ACV, su incidencia e implicaciones. Sin embargo, el nivel de afectación a una persona es tan fuerte que se calcula que aproximadamente dos millones de neuronas mueren por minuto en un paciente con ACV.

Por esa razón, la atención inmediata es fundamental para salvar vidas, o prevenir que un paciente experimente discapacidad permanente. De acuerdo con el estudio Quantics, realizado en 2019, aproximadamente, el 70% de las personas que sufren un ACV no puede regresar a trabajar y el 30% necesita ayuda permanente para caminar.

Un factor que incrementa la situación de riesgo de los pacientes que experimentan un ACV es el desconocimiento del hospital o clínica que cuente con el equipamiento adecuado para tratar dicha emergencia.  “En Ecuador, 4 de cada 10 pacientes con ACV son redirigidos a otros centros de salud, generando una pérdida de tiempo valiosa para salvar la vida de quienes padecen este incidente” explica Edwin Bucheli, médico cirujano ecuatoriano.

En ese sentido, es fundamental que la población se mantenga informada respecto a los síntomas de un ACV, así como el procedimiento a seguir en caso de que se presente esta emergencia, o que una persona cercana la experimente.

¿Qué es un ACV?

• Un ACV o ataque cerebrovascular es una urgencia médica.
• Un ataque cerebrovascular sucede cuandose interrumpe el suministro de sangre que va hacia o irriga una parte del cerebro, impidiendo que el tejido cerebral reciba oxígeno y nutrientes.    
• El ACV (accidente cerebrovascular) puede producirse por una arteria bloqueada (accidente cerebrovascular isquémico) o por la rotura de un vaso sanguíneo(accidente cerebrovascular hemorrágico).  

La iniciativa “Actúa Con Velocidad” es una vía de información acerca del ACV para la ciudadanía:

• Cuando una persona sufre un ACV, su vida depende de que las personas a su alrededor puedan reconocer los síntomas de un posible ACV y que reaccionen de manera veloz.
• Por eso, frente a un ACV, debemos actuar con velocidad y llamar al servicio de emergencia o acudir a urgencias de un hospital preparado lo más rápido posible.
• Saber reconocer los síntomas y actuar rápidamente puede salvarle la vida a una persona o darle la posibilidad de reducir al mínimo las secuelas y tener una mejor calidad de vida.
• ¡Ante un ACV, actuar rápido puede salvar vidas! Previene, identifica y #ActúaConVelocidad.
• Visita el portal digital https://www.actuaconvelocidad.com/es para encontrar mayor información.