Cinco hábitos esenciales para garantizar el bienestar del adulto mayor
El cuidado de la salud y bienestar de los adultos mayores es de vital importancia, prestar atención a su salud mental y bienestar general es determinante para mantener su calidad de vida.
“Las personas de la tercera edad suelen sufrir limitaciones funcionales, físicas y de salud, mediante la incorporación de ciertos hábitos importantes en su rutina diaria pueden apoyar estos procesos y mejorar su calidad de vida. El apoyo familiar y social en la inclusión de estas prácticas como rutinas, es esencial para garantizar su bienestar integral y prevenir complicaciones futuras.”, explica Adriana Fuentes, Nutricionista de Farmacias Económicas.
Sobre los hábitos para adultos mayores:
Incluir nuevos hábitos en personas de cualquier edad puede resultar complicado al principio. En adultos mayores, podría parecer un poco más difícil, sin embargo, muchos de ellos suelen volverse metódicos y rutinarios, factor que apoyaría la inclusión de estos en su día a día; más aún, contando con apoyo de seres queridos. Es fundamental comentarles a ellos la importancia de estas rutinas diarias para su salud. La prevención siempre será la mejor forma de evitar enfermedades, señala la especialista de Farmacias Económicas.
Por esto recomienda las siguientes prácticas:
Actividad física habitual: Mantener el cuerpo activo no solo ayuda a tonificar los músculos y mantener la calidad óseo - articular, también brinda aportes al sistema nervioso, inmunológico y a la salud general del cuerpo. Existen evidencias científicas sobre la disminución de mortalidad y riesgos de enfermedades gracias a la actividad física. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), es recomendable destinar al menos 20 ó 30 minutos de ejercicio físico en adultos mayores con frecuencia de 3 a 5 días a la semana. Los ejercicios más recomendados son: cardiovasculares moderados, de resistencia, calistenia con pesas, de equilibrio, tai chi y yoga.
Cuidado de la piel: Este punto también es muy importante, a pesar de que suelen existir manchas seniles en la piel, lo ideal es siempre protegerla del sol con bloqueadores solares con Factor de Protección Solar (SPF) mayor a 60; esto disminuirá el riesgo de nuevas manchas y complicaciones graves que podrían ser cancerígenas. La hidratación constante es un factor fundamental en el cuidado de la piel, especialmente en adultos mayores que tienden a deshidratarse con mayor facilidad y perder más elasticidad cutánea, debido a esto, se recomienda beber entre 1 y 2,5 litros de agua al día.
Cuidado de los huesos y articulaciones: El colágeno es esencial para la formación, reparación y mantenimiento de cartílagos, huesos y músculos en el cuerpo. Con el pasar de los años, este va disminuyendo sus propiedades y afectando varios sistemas del cuerpo. Según la OMS, el 50% de la población mundial mayor de 60 años padece osteoartritis o artrosis. Por esta razón, se aconseja suplementar esta carencia de colágeno de la mano de un especialista, para conocer el tipo de producto y dosis recomendada en cada caso particular. El producto se puede encontrar en varias presentaciones: pastillas, polvo, hidrolizado e inyectable.
Higiene: Es necesario usar productos de higiene acorde a las necesidades de los adultos mayores. Los productos limpiadores como jabones de todo tipo y shampoos deben tener un pH neutro para evitar irritaciones cutáneas. La experta, María Eugenia Cantos de Farmacias Económicas, recomienda mantener la piel del cuerpo y rostro hidratada, usar cremas dermatológicamente probadas para evitar reacciones o alergias. La higiene dental es de igual importancia, en los dientes se debe aplicar pasta dental con flúor después de cada comida; en el caso de contar con dentadura postiza, deben limpiarse con la misma periodicidad para evitar irritaciones en las encías y complicaciones futuras.
Vitaminas y minerales: Con el paso de los años el cuerpo deja de asimilar completamente las vitaminas y minerales de los alimentos, a pesar de que siempre se recomienda una dieta rica en frutas, verduras y pescado, en muchos casos puede ser necesario suplementar esta alimentación. Según la EFSA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria) vitaminas y minerales como: el cobre, folato (ácido fólico), hierro, selenio, zinc y vitaminas A, B6, B12, C y D son esenciales en el correcto funcionamiento del sistema inmunológico. Otras vitaminas importantes para el adulto mayor son:
- K: responsable de la circulación sanguínea y encargada de prevenir coágulos.
- Omega 3: Regula enfermedades relacionadas al corazón y controla el azúcar en la sangre.