Colombia consiguió su segunda victoria en las eliminatorias a Rusia y el envío anímico que necesitaba para volver a Barranquilla para esperar a Ecuador el martes. Pese a que los ‘cafeteros’ se adelantaron en el tanteador, los locales consiguieron una igualdad transitoria que puso en aprietos a los visitantes. No obstante, el delantero de la Sampdoria Luis Muriel consiguió un gol de último minuto que salvó las aspiraciones de su selección.  

Los ‘cafeteros’ cedieron el balón a los locales para no apresurar el desgaste físico. Bolivia asumió la iniciativa. Intentó asediar el campo colombiano con el toque continuo.

Pero los visitantes lucieron sólidos en defensa y consiguieron dejar al rival a una distancia prudente de la zona de peligro. A los 5’ Ruddy Cardozo apeló a un potente remate de media distancia para sorprender al portero. Sin embargo, David Ospina atajó con seguridad.

Tras medir los alcances de la propuesta de los hombres de Julio César Baldivieso, Colombia decidió lanzarse al ataque y fue contundente. En la primera ofensiva -a los 9 minutos- James Rodríguez anotó. Carlos Bacca se proyectó por la banda izquierda y a un par de metros de la raya de fondo descargó un centro hacia el volante del Real Madrid, quien la bajó de pecho y definió de zurda para vulnerar al portero Romel Quiñónez.

Luego de la apertura del marcador el cotejo se trasladó al medio campo en donde se volvió trabado y  cargado de faltas. Las acciones ofensivas fueron intermitentes con remates, tanto de los hombres de José Pékerman como de los locales. Primero, Juan Guillermo Cuadrado, con un tiro desde fuera del área a los 25’ que salió. Poco después Leonel Morales replicó, pero falló. En ambas ocasiones el disparo fue producto más de la falta de ideas para elaborar y acercarse con peligro.

A 5 minutos de que finalizara la primera parte, Rodríguez se asoció con Carlos Bacca para incrementar la diferencia transitoria. El 10 avanzó por carril central y desde allí sacó un pase elevado al área. El delantero del AC Milan se impuso ante la marca del zaguero Edward Zenteno, picó el balón con izquierda, esperó a que bajara y definió cruzado.

Con una importante ventaja de por medio parecía que Colombia solo tenía que dosificar las energías sobre la cancha para evitar sorpresas y jugar con la desesperación del local. Pero las cosas se complicarían antes de que los visitantes se hicieran con los 3 puntos.

Tragedia con final feliz

En la segunda parte, Bolivia salió con ímpetu y violencia para tomar el control y descontar. A cuatro minutos del silbatazo de reinicio una jugada de ataque que no prometía complicar a los ‘cafeteros’ terminó en una falta penal.

Un pase de los bolivianos fue desviado en el área por la mano de Jeison Murillo, el árbitro Wilton Pereira decretó penal y Juan Arce asumió la responsabilidad.
El cuadro de Baldivieso luchó por la tenencia del esférico acumulando faltas y dificultando los intentos por elaborar de los ofensivos.

A los 62’ Bolivia se encontró con el gol soñado. Una desconcentración de la zaga colombiana permitió que Yasmani Duk enviara un pase desde la banda izquierda para Alejandro Chumacero, quien se quedó al borde del área con la pelota. El volante del The Strongest desequilibró a su marcador y luego sacó un potente remate de derecha que venció al portero del Arsenal de Inglaterra.

Bolivia siguió atacando, pero esta vez ante un rival que apostó a dejar la reserva de nafta sobre el gramado en el intento desesperado por sumar de a tres. No hubo ideas claras en ataque en ninguna de las dos escuadras y el tiempo avanzaba amenazando con un reparto de puntos. Algo que no le servía a ninguno.

En el segundo minuto de adición -de los cinco que dio el réferi- el delantero Luis Muriel se encargó de salvar a su selección. Desbordó por el costado derecho eludiendo al lateral boliviano y apenas entrando al área sacó un fuerte disparo que se coló por la parte inferior del parante derecho del arco defendido por Quiñónez. La anotación dejó sin opciones a Bolivia y el pitazo final decretó la victoria del visitante.

Colombia suma así siete unidades que lo ponen cerca de la mitad de la tabla. Mientras que los andinos se mantienen en el fondo con solo tres unidades. (O)