Intelectuales de Quito ratifican su apoyo a la reelección de Barrera
"Estas elecciones son un momento crucial en la disputa por el derecho a la ciudad", escriben siete intelectuales quiteños, en un manifiesto colectivo titulado: "Contra la política fácil: la batalla de Quito", en donde reiteran su apoyo a la reelección a la alcaldía de Quito, de Augusto Barrera.
Tania Hermida, Valeria Coronel, Franklin Ramírez Gallegos, Paco Salazar Larrea, Lisandra Rivera, Santiago Ortiz y Juan Carlos Donoso Gómez consideran que la candidatura de Mauricio Rodas (Suma- Vive) "no es inofensiva y va más allá de la búsqueda de otra administración para la ciudad".
El grupo de intelectuales afirman "que quede claro: para Rodas, Quito es apenas un trampolín dentro un proyecto anti-popular de mayor envergadura. El modo en que España, Grecia o Italia resuelven hoy la crisis económica -pulverizando el empleo, la seguridad social, la política de bienestar- es el espejo en que podemos ver la voracidad de las oligarquías cuando recuperan el poder".
Consideran que este no es el momento para que los "sectores democráticos, populares y progresistas reiteren su distancia o se instalen en la indiferencia cómplice con el candidato-maniquí de las corporaciones y del capital inmobiliario-especulativo. La fácil apuesta -“los enemigos de mis enemigos son mis amigos”- suele acabar en coaliciones malformadas y enormes frustraciones colectivas".
Para elloS, aunque hay mucho que profundizar, el sentido de dicho proyecto está contenido en las políticas de la primera administración de Barrera: "la legalización de barrios populares y la titularización de tierras rompen con el círculo vicioso de traficantes de tierras y especuladores inmobiliarios; el Metro y la promoción del crecimiento vertical con vivienda masiva tensionan la política colonizadora que arroja a las periferias a las clases populares y usurpa las tierras de las comunidades; la proliferación de espacios públicos (Qmandá, parques metropolitanos, bulevares, centros barriales de desarrollo cultural, etc) ofrece a la sociedad la opción de reconocerse como habitantes de una ciudad policlasista, cosmopolita e intercultural".
Argumentan que los avances de la ciudad con la administración de Barrera "son contrarios al proyecto de la ciudad amurallada y las urbanizaciones privadas, donde Rodas, Durán-Barba, Lasso y cía., celebrarían su victoria -y sus futuras ganancias- si no vemos con desprendimiento y sentido autocrítico la complejidad del momento".
Al concluir el manifiesto, los quiteños señalan "que no quepa duda: aún en medio de las diferencias, nuestro voto es para Augusto Barrera".