Por este sector pasaba el llamado “gallinazo”
Todos Santos, un barrio independentista donde también se hace buen pan
El sector Todos Santos desde la independencia se convirtió en uno de los barrios más importantes y tradicionales de Cuenca.
Rafael Idrovo, de 80 años, aún recuerda cómo era el sector en antaño. “Me acuerdo que aquí (donde se levanta la iglesia) se terminaba la ciudad. Más allá no había más casas, todo era una planicie”, indica este hombre que tiene varias reliquias de venta en el sector.
Idrovo trabajó como cartero en los correos hace más de 50 años. “Tenía mi bicicleta y recorría parte de la ciudad, veía cómo crecía y se ponía hermosa la ciudad”, dice.
Por este sector (Todos Santos) pasaba el llamado “gallinazo”, que no era otra cosa que una quebrada que llevaba todos los desechos recogidos de la ciudad y que desembocaban donde ahora se levanta el mercado 12 de Abril.
Pero Todos Santos, según Idrovo, nunca perdió sus atractivos. En este sitio se ubicaron las primeras panaderas de Cuenca, como Mercedes Vélez y Mercedes Quinde, quienes dejaron un legado que aún se mantiene entre sus descendientes, que es elaborar el pan en horno de leña.
“Este sitio también fue hace 50 años la entrada de la ciudad. Desde las partes lejanas, como El Valle, Chilcapamba, que hoy son parroquias del cantón Cuenca, llegaban las personas con sus acémilas cargados de carbón y leña”, recuerda.
Agrega que los caballos se dejaban en la Calle Larga para que sus dueños pudieran avanzar hasta el mercado 9 de Octubre o al mercado 10 de Agosto. (I)