La implosión se realizó a las 13:00, ante la mirada de centenares de personas
El Centro Comercial de Portoviejo se desplomó en 3 segundos
Faltando pocos minutos para las 13:00, el portovejense César Chilán se acercó hasta la zona cero de la capital manabita para ver por última vez el edificio donde quedaba el Centro Comercial afectado por el terremoto del 16 de abril.
Luego, al igual que varios ciudadanos que arribaron hasta un cerco de 300 metros de distancia del coloso, escuchó la sirena sonar tres veces. En la última alarma, la estructura se desplomó. Solo tres segundos demoró la demolición por el método de voladura controlada, que levantó una gran polvareda, la que tardó poco más de 2 minutos en esparcirse.
“Yo creía que demoraba un poquito más el proceso, pero esto fue cosa de pocos segundos”, dijo Chilán, quien ahora, a sus 70 años, espera que Dios le preste vida para “poder ver resucitar a mi querido Portoviejo, afectado sobre todo en el casco comercial”.
En Rosa de Cedeño había sentimentalismo, como en la mayoría de quienes vivieron la demolición. Para ella, así como para Marcos García, fue impactante ver en directo caer un ícono de la ciudad, que prestaba servicios desde hacía 36 años. “Tenía un poco de nervios por alguna piedra que me pudiera chispear, pero no se sintió nada, solo un pequeño ruido”.
Más de 150 ciudadanos sacaron sus celulares y grabaron la escena, mientras dos drones captaban el momento. La detonación se transmitió en vivo a través de canales de televisión locales.
Desde el ECU-911, autoridades observaron el hecho. Luego se acercaron a la zona, recorrieron los alrededores del edificio demolido y constataron que no hubo afectación a infraestructuras contiguas.
William Salazar, director de Seguridad del Gobierno local, explicó que “fue un excelente trabajo realizado por la empresa pública española Tragsa. Desde este sábado se comenzarán a retirar los escombros”.
El coordinador zonal de la Secretaría de Riesgos, Johan Loor, indicó que el polvo que se levantó no afecta a la población. “Todo salió de acuerdo a lo planificado”.
El gobernador de Manabí, Javier Santos, dijo que para poder reconstruir la provincia de una manera eficaz es necesario cumplir de manera estricta y ordenada con las demoliciones restantes.
Inicialmente se había contemplado un procedimiento de manera distinta, pero tras una sugerencia del alcalde de Portoviejo, Agustín Casanova, se consideró el sistema de implosión. “Es importante decir que nunca en el país ha habido un proceso de este tipo, peor en la provincia”.
El secretario técnico para la Reconstrucción de Manabí y Esmeraldas, Carlos Bernal, explicó que previo a la demolición con voladura controlada se activaron todos los protocolos a nivel cantonal. “Realmente el trabajo fue impecable”.
Detalló que Casanova tiene un proyecto para esta zona, como es levantar una plaza. “Vamos a transformar Portoviejo en una ciudad de espacios verdes y dignos, ya no en un centro tan congestionado”.
En Portoviejo hay un calendario tentativo para la implosión del Centro Médico del Pacífico y el edificio Álava, pero primero se hará una inspección de los procesos. “Vamos a hacer la misma revisión de protocolo”. No se anunció fecha.
Carlos Consejo, de la empresa Tragsa, agradeció que el Gobierno haya confiado en ellos. Explicó que los explosivos usados estuvieron previamente en el Cuartel del Fuerte Militar y en la mañana fueron llevados a la zona para la carga y su detonación. (I)