El Ministerio del Ambiente (MAE) y la Subdirección de Protección del Medio Ambiente de la Policía Nacional presentaron de manera oficial la campaña ‘Tradición y Conservación van de la mano’, cuyo objetivo es evitar la comercialización de ramos elaborados con palma de cera, en el marco de la celebración de Semana Santa a nivel nacional.

Se busca concienciar a la ciudadanía sobre la importancia de proteger este recurso natural. el ministro del Ambiente, Tarcisio Granizo, señaló que “la meta de esta campaña radica en proteger las siete especies de palma que existen en los bosques nublados del Ecuador”.

El funcionario destacó que esta planta se encuentra en categoría Vulnerable, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, para los ecosistemas, pues provee de alimento y refugio a varias especies de mamíferos y aves silvestres, entre ellas el Loro Orejiamarillo y el Perico Cachetidorado.

Granizo enfatizó la posibilidad de elaborar los ramos con materiales alternativos provenientes de plantas, como: totora, laurel, maíz, sigse, paja, trigo, cebada, entre otras.

Durante Semana Santa, las direcciones provinciales del Ambiente efectuaran operativos de control a nivel nacional en conjunto con la Subdirección de Protección del Medio Ambiente de la Policía, con el fin de evitar la venta ilegal de artesanías hechas con palma de cera.

El coronel de Policía Washington Martínez, jefe de la Unidad de Protección del Medio Ambiente (UPMA) , indicó que se tiene previsto realizar controles y acciones preventivas en lugares religiosos de mayor aglomeración de feligreses, para detectar rutas de abastecimiento y comercialización. Para ello se cuenta con 295 policías.

En el año 2013, cuando empezó la campaña, se contabilizaron 1.750 plantas retenidas, y en el 2017 hubo 16.893. Ante este incremento se busca fortalecer los mensajes hacia la comunidad para evitar el uso y comercialización de esta planta.

En 2017, en el marco de esta campaña se realizaron 100 operativos a nivel nacional, en los cuales se decomisaron más de 147 kilos de Palma. De igual forma se capacitó a 2 mil personas sobre la importancia de la conservación de la biodiversidad nacional.

El MAE recordó ´que quienes extraigan, comercialicen o transporten especies silvestres pueden ser castigados con pena privativa de libertad de uno a tres años y multas que van de uno a diez salarios mínimos vitales generales, según lo estipulado en el Código Orgánico Integral Penal y la Ley Forestal y de Conservación de Áreas Naturales y Vida Silvestre, respectivamente. (I)